
Por: Angela Ackerman & Becca Puglisi
Traducción por: Celia M. Adán
DEFINICIÓN: estado de esfuerzo o tensión.
Señales físicas:
- Músculos rígidos.
- Mandíbula apretada.
- Tendones que sobresalen.
- Medir los pasos.
- Un paseo rápido y apresurado.
- Habla acelerada.
- Ladrar órdenes a la gente.
- Ojos que van de un lado a otro.
- Ponerse de mal humor.
- Usar un apretón de manos fuerte y comercial.
- Movimiento constante.
- Hablar con un tono apresurado.
- Gritar.
- Mover el cuello y los hombros.
- Sacudir las manos y los brazos.
- Frotar el cuello.
- Pasar las manos por el pelo.
- Llegar tarde a las reuniones y citas.
- Entrecerrar los ojos frunciendo el ceño.
- Criticar.
- Inclinarse hacia delante con el cuello rígido.
- Abordar las tareas rutinarias de forma mecánica y eficiente.
- Conducir de forma ofensiva o irreflexiva.
- Escuchar música alta y de letra y ritmo que sugiere enfado, protesta, ira.
- Quejarse.
- Rechinar los dientes.
- Masticar chicle, hacer crujir los nudillos, y otros gestos para aliviar el estrés.
- Romper a llorar.
- Agresión.
- Saltarse las comidas.
- Sensaciones internas:
- Dolor de cuello y espalda.
- Tensión muscular o espasmos.
- Dolor de cabeza.
- Pérdida de apetito.
- Nudos en el estómago.
- Acidez estomacal.
Respuestas mentales:
- Dificultad para dormir.
- Irritabilidad.
- Incapacidad para ver el valor o el disfrute de las pequeñas cosas.
- Impaciencia.
- Despertar del sueño sintiéndose inquieto y sin haber descansado lo suficiente.
- Se convierte en una persona conflictiva.
- Incapacidad de desconectar la mente.
- Falta de concentración.
- Preocupación.
- Actitud defensiva.
Señales de estrés agudo o prolongado:
- Pérdida de peso.
- Aumento de la ansiedad.
- Insomnio.
- Beber para conciliar el sueño.
- Dependencia de la medicación para dormir.
- Agotamiento.
- Trastornos digestivos.
- Hipertensión.
- Aumento de las enfermedades.
- Relaciones tensas.
- Úlceras.
- Preocupación que roza la paranoia.
Señales de estrés reprimido.
- Cerrar los ojos y respirar profundamente en un intento de relajarse.
- Aumento del ejercicio físico como forma de liberación.
- Aumento de la negatividad.
- Poner excusas por el comportamiento.
- Comprometerse en exceso en un esfuerzo por hacer ver que todo está bajo control.
- Negación.
- Forzar la sonrisa.
- Pedir disculpas por el tono o las acciones cometidas.
CONSEJO PARA EL ESCRITOR: La tensión corporal debe tener siempre una causa emocional de fondo. Asegúrate de que el componente emocional está unido a la tensión corporal para que el lector no tenga ninguna duda de que algo está impulsando este comportamiento, en lugar de ser una característica normal.
También puede interesarte:
Deja una respuesta