Alina y Mal han logrado escapar del control del Oscuro al cruzar el Mar Auténtico, pero ambos saben que su seguridad es algo temporal. Las noticias de que el Hereje Negro sobrevivió a la Sombra están por todas partes, y este no descansará hasta volverla a tener bajo su control. Mientras que la situación en Ravka tampoco son alentadoras, el Segundo Ejército se ha dividido y el país está a punto de una guerra civil, con la Sombra extendiéndose cada día más./
Alina está dividida entre si debería regresar a su país y, de alguna manera, combatir al Oscuro o adentrarse en las partes más rurales de Novyi Zem, donde ella y Mal podrían llevar una vida anónima hasta que encuentren la oportunidad adecuada. Sin embargo, el Oscuro le ahorrará elegir y se la llevará en la nave del temido pirata Sturmhond hacia el Paso de los Huesos, en busca del Rusalye.
Todos los libros de la pequeña ciencia insisten en que ningún grisha puede tener dos amplificadores. Pero, al parecer, Morozova, un santo y el grisha más poderoso de la historia de Ravka, decía lo contrario, siempre y cuando estos estuvieran hechos de tres animales muy especiales. Amplificadores que harán a Alina cada vez más poderosa y comience a darse cuenta de que al obtener el poder para derrocar al Oscuro, podría terminar sustituyéndolo.
Asedio y tormenta es el segundo libro de la trilogía Grisha, escrita por Leigh Bardugo y es un libro que terminé de leer debido a que era extremadamente corto. Pero, salvo por Nikolai Lantsov (un personaje nuevo, pero que ya conocía de Reino de Ladrones), que fue con el que más me divertí y que me gustaría que en el futuro la autora le dedicara un libro, el resto de los personajes son genéricos y se apartan poco del camino argumental trazado por la autora.
El melodrama llega a un nivel tan alto que acuñé un término para este tipo de argumento: la babosinovela. Cuya definición es: dícese de la novela en que lo único que hacen los protagonistas es celarse, negarse que se aman, el lenguaje del autor te da ganas de vomitar arcoíris y, a pesar de que han estado solos un montón de veces, no han concretado nada. Se cree que esta última característica es el origen y solución del problema.
En un mundo ideal (o sea, si yo hubiera escrito/editado la novela), Mal hubiera muerto heroicamente y nos ahorraríamos el drama de Alina, que más trillado y hecho para manipular emocionalmente al lector no se puede.
¿Y tras destrozar la novela, se las recomendaría leer? Por supuesto, Nikolai salva el libro, hay suficiente historia secundaria para que te entretengas. Y, si eres de los que les gusta este tipo de romance, te quedaste enganchado con el primer libro o, simplemente, eres alguien que siempre completa las sagas que comienza a leer. Entonces, Asedio y tormenta, de Leigh Bardugo es un libro que deberías leer.
El Último Puente 
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