¿De dónde sacas tus ideas?
Dice la infame pregunta. Los escritores la odian debido a que no tienen idea. A la mayoría de nosotros les gustaría saber. Haría las cosas mucho más fáciles. Pero así son las cosas.
Existes, y en un punto una idea se adentra en tu cabeza. Y comienza una historia.
Cuando tienes una idea particularmente buena: una que realmente te gusta, comienzas a ser protectivo respecto a ella. No quieres desperdiciarla. Debido a que no tienes idea de donde vino, no estás seguro de cómo replicar el proceso. Puede ser esta la única. Puedes no volver a tener una idea como esta nunca más.
Y aun así, la musa sigue regresando.
Otros escritores tienen un problema ligeramente diferente. Parecen no tener ninguna idea, ni pistas de donde comenzar o sobre qué escribir.
Una cosa sobre las ideas es que tienes que aprender a reconocerlas. Si estás comenzando, estarás ciego a la mayoría de ellas. Para ver ideas a tu alrededor, tienes que escribir.
Pero, ¿cómo se supone que escribas cuando no tienes ninguna idea? Hay muchas maneras: comienza escribiendo fanfiction, usa prompts. No te preocupes respecto a donde terminas, sólo sigue adelante.
Estaba en el mismo bote cuando comencé esta serie de posts. Quería tener un segmento regular en el blog donde compartiera lo que aprendía y en lo que estaba trabajando. Estaba procastinándolo debido a que estaba preocupado respecto a las ideas. ¿Cómo es posible que pueda tener un nuevo tema sobre el que escribir cada semana?
Me senté y lo pensé. Un par de horas más tarde, no tenía más que un puñado de temas sobre los que escribir. Pero, de cualquier manera, comencé a escribir y aquí estamos, casi 160 post más tarde. Ahora ni siquiera estoy cerca de quedarme sin cosas sobre las que escribir. De hecho, ahora tengo una larga lista de ideas de la cual escoger.
Mientras más escribas, más ideas tendrás. Es contraintuitivo debido a que eso no es a lo que estamos acostumbrados en el mundo real. Cuando te comes una manzana, se va. Por otra parte, cuando usas una idea, pronto tendrás otra.
Hoy en día, casi todo el tiempo en el que estoy trabajando en un post, tendré una o dos ideas que agregar a mi lista. Raramente resulta en menos.
El problema es que todavía no puedo explicarlo. No sé por qué esto sucede, y si va a seguir sucediendo.
La única cosa que me queda es creer. Tienes que aprender a confiar en que mientras sigas adelante, habrá más. Ese es el porque existe todo este conocimiento popular sobre las musas, la inspiración divina y cosas así.
Si te estás sintiendo atascado, toma una pluma y escribe algo. Adéntrate en el flujo. No tiene que ser perfecto o incluso bueno. No tienes que publicarlo en ningún lado.
Muy pronto, tendrás más ideas de las que puedes manejar.
Hola, soy Radek 👋. Soy escritor, ingeniero de software y fundador de Writing Analytics —un editor y rastreador de escritura diseñado para ayudarte a derrotar el bloqueo de escritor y crear una rutina de escritura sostenible.
Traductor: José Alejandro Cantallops Vázquez
Puedes seguirlo aquí en su blog de Tumblr.
Si te gustó esta entrada, puede que te interese seguir leyendo otros consejos de Radek que he traducido (clic aquí).
El Último Puente 
Deja una respuesta