Atracción

Por: Angela Ackerman & Becca Puglisi

Traducción por: Celia M. Adán

DEFINICIÓN: Subyugante sensación de curiosidad o placer respecto a una persona concreta.

NOTA: una fuente de interés más leve puede provenir de un objeto de deseo (como ver un codiciado auto de época), pero la verdadera atracción suele darse entre personas. Por lo tanto, la mayoría de las sugerencias aquí se centran en las interacciones humanas.

Señales físicas:

• Ojos que siguen la fuente de atracción.
• Mirada fija.
• El cuerpo se queda quieto.
• Pupilas dilatadas.

• Tocar la boca, llamando la atención sobre los labios.
• Reflejar los movimientos, los gestos y la postura de la otra persona.
• Dirigir miradas furtivas.
• Hacer preguntas sobre la otra persona.
• Coquetear.
• Mirar con ardor, intensidad, a la otra persona.
• Inclinar el cuerpo hacia la otra persona.
• Agitar leve y rápidamente la mano a forma de saludo.
• Encontrar oportunidades de toques «accidentales».
• Tocar el pelo, alisar la ropa, alisar un cuello.
• Hacerse el difícil (fingir desinterés).
• Hacer cumplidos.
• Sacar el pecho (erguirse).
• Abrir ligeramente los ojos.
• Exponer el cuello a la fuente.
• Lamerse los labios.
• Hacer preguntas con doble sentido.
• Hacer preguntas de naturaleza cada vez más personal.
• Toques cariñosos (chocar las rodillas, apretar la mano).
• Sentarse uno al lado del otro para que las piernas o los hombros se toquen.
• Ofrecer toda su atención.
• Preguntar por verdadera fascinación y deseo de saber más
• Mirada intencional; dirigida directamente los ojos de la otra persona.
• Hablar con los amigos sobre la otra persona.
• Perder el interés en todo lo demás cuando la otra persona entra en la habitación.
• Silbar en voz baja o murmurar una exclamación.
• Se le traba la lengua; trabajo para encontrar las palabras.
• Agarrarse a cualquier intento de conversación.

Sensaciones internas:

• Un mariposeo en el vientre.
• Rodillas que se tambalean, tiemblan o se sienten débiles.
• La boca se inunda de humedad.
• Un hormigueo generalizado.
• Sensación de energía.
• Se corta el aliento, se hace un nudo en la garganta.
• Una sensación casi eléctrica al encontrarse con los ojos de la otra persona.
• Sentir una conexión emocional o espiritual con la otra persona.
• Aumento de la temperatura corporal.

Respuestas mentales:

• Disposición a salir de la zona de confort para conseguir el objeto de la atracción.
• Audacia o atrevimiento.
• Deseo de tocar.
• Ver todo lo que hace la fuente como muy interesante.
• Ver sólo lo positivo en la otra persona.
• Esforzarse por ser ingenioso o encantador.
• Soñar con la otra persona por la noche.
• Soñar despierto o fantasear sobre la persona objeto de atracción.
• Buscar oportunidades para encontrar o estar con la otra persona.
• Dificultad para expresar lo que se piensa.
• Excitación.
• Optimismo.
• Pensamientos sexuales.

Indicios de atracción reprimida:

• Encontrar formas de estar cerca de la persona pero sin comprometerse con ella.
• Negación de cualquier sentimiento.
• Reforzar una relación existente para apoyar la idea de que uno no está interesado.
• Hacer preguntas sutiles sobre la otra persona.
• Mejillas sonrojadas.
• Evitar a la otra persona.
• Gestos y comentarios despectivos.
• Evitar el contacto visual.
• Hacer amistad con los amigos de la otra persona para tener acceso a ella.
• Observar sutilmente a la otra persona.
• Juguetear con las cosas cuando la otra persona está cerca; estar nervioso.
• La voz se quiebra o sube de tono.
• Sudar.

CONSEJO PARA EL ESCRITOR: Con un fuerte estado reactivo como el de la atracción, ten en cuenta que las expresiones de uno variarán según el sexo, la edad y la experiencia.

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