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Susurros Heroicos, Leonardo Maceira Matos (Gren Maun)

Cian ha sido muchas cosas: hijo, amigo, hermano, superviviente, profesor, ladrón, asesino, mercenario y un hombre temido en los 9 reinos. Su ambición y sed de sangre lo hacen anhelar más poder incluyendo el perteneciente a los elegidos de los dioses conocido como “la Magia de los Ens”. Nunca pensó que el día que la obtuvo lo conduciría a heredar la fuerza del “Héroe de los Susurros”, una figura mítica destinada a enfrentarse al “Amo del Silencio” en el Fin de los Tiempos. Ahora convertido en parte de la nobleza y junto a su pequeña banda de mercenarios deberá hacer frente a su nuevo destino y luchar por el futuro del mundo que juró destruir.

51 comentarios sobre “Susurros Heroicos, Leonardo Maceira Matos (Gren Maun)

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  1. Ya leído completo todo lo que has publicado de tu historia, camarada.
    Tardé hasta la mitad del segundo capítulo en comprender que los Ens eran una especie de habilidades/poderes y no una clase de personas.
    Ahora, entrando en los detalles técnicos de la narración:
    -Tienes que trabajar más el como los personajes muestran sus emociones, lo dices, pero no lo describes con gestos físicos, el dolor, la indecisión, la decepción. Eso toma su tiempo, pero prueba describir que gesto asocias con cada emoción en vez de decir que la siente.
    -Le copiaste esta frase a Sanderson: Sabes a veces me pregunto si soy el héroe que todo el mundo espera; cualquier lector de Sanderson (y esos hoy son muchos, incluso yo que lo leo ocasionalmente) se daría cuenta de eso y te trataría como un imitador. El sentido de la frase lo puedes expresar de otra manera si la quieres conservar, algo así como: Viejo, ¿de verdad crees que soy yo? Todos dicen que sí, pero no me confío… Y le pasas la pelota al maestro.
    -En cuanto al silencio, este es algo más que Oscuridad, si logra crear un silencio absoluto o con valores negativos (hay salas especiales que tienen valores negativos de sonido), este comienza a provocar ilusiones auditivas, el mismo latir de tu corazón suena atronador y algunos sujetos experimentales aducen que pueden sentir incluso como la sangre fluye por su cuerpo antes de presentar alucinaciones y arritmía.
    -Una vez más, deberías hacer de la puntuación tu principal objetivo en lo adelante, tus oraciones dicen cosas contrarias a las que quieres interpretar y eso te es contraproducente, básicamente debido a que si compites en un concurso o mandas una editorial así es una manera casi directa de que rechacen tu texto.
    -Evita los cubanismo, onda echar la bronca o chance, así como la jerga del mundo real. Los cubanos lo entenderían, pero lectores de otros países no, así que lo más recomendable es buscarle su equivalente neutro.
    -Si hay varios dioses, deberías ponerlo un nombre al de Cian, aunque sea para diferenciarlo. Lo otro es que cede demasiado fácil y es un indeseable, deberías trabajarlo un poco más, no ha llegado a ser dios por ser un tarugo o sí lo hizo, tiene alguna otra habilidad importante.
    -Creo que lo que estás intentando lograr con Cian es que sea un cabrón carismático y eso lleva un equilibrio bastante difícil de lograr y crear un personaje con el que no empatizas (aunque se nota algo de influencia de personajes anime o los videojuegos que, a menos que escribas novelas ligeras es perjudicial). Mi recomendación es que sigas trabajándolo y darle una motivación de porque quiere ser un desastre o un marcado, más trasfondo.

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    1. Ante todo, muchas gracias por leer camarada y por esa crítica que has hecho que esta genial. Ya he tomado nota de todo lo señalado y empezare a ponerlo en práctica desde ahora y cuando vuelva a rescribir el borrador. Que decir, actualmente veo que la historia que quiero contar está muy por encima de mis habilidades, pero debo seguir adelante si quiero aprender.

      Como dices lo que quiero expresar a veces se contradice o no se entiende ya he visto que muchos de los conceptos no llegan a los lectores. Bueno empezando por el de Ens. Los Ens son los magos de la historia y se me ha hecho difícil expresarlo. La esencia es la energía que usan los magos(Ens) o sea la magia y dependiendo de que “magia” usen es como serán conocidos.
      Los que pueden dotarse de algo de lo que carecen se le conocen como susurradores ya que lo hacen entre susurros que solo ellos entienden. Por el contrario, un Ens que use la esencia para quitar algo es conocidos como silente. El silencio y los susurros son términos abstractos y contrarios, un silente de ambiente te puede quitar o silenciar las fuentes de luz y no las de sonido. Cian no se llega a enfrentar a un silencio absoluto ya que es casi imposible que dos silentes estén tan sincronizados como para realizarlo. Ningún Ens es igual a otro Ens, aunque sean del mismo tipo y tengan las mismas naturalezas. Bueno el sistema de magia me quedo muy complejo, pero está equilibrado, tendré que trabajar más en como se muestra para que el lector entienda lo básico.

      En cuanto a los personajes, si debo ver como mejoro en como muestran sus emociones. Lo de la frase de Sanderson se me fue sin darme cuenta soy muy fan de la primera era de Nacidos de la Bruma y estoy estudiando la escritura en dichos libros. Trataré de que no vuelva a pasar. Aunque bueno no sé qué tantos autores ponen una cita sobre el mundo encima de sus capítulos para ir explicando los conceptos de la historia, si es único de Sanderson creo que también debo cambiarlo.

      El dios de Cian te digo que se debe quedar así, es indeseable, nadie sabe su nombre. El cede, pero él sabe por qué lo hace y créeme no es por miedo a Cian a él poco le importa el Héroe de los Susurros marcado o no. No veras a ningún dios usando habilidades, ni siquiera dando la cara en esta historia, ellos usan a los Ens, le dan la esencia y los poderes a cambio de favores. Otra historia diferente será con ellos más a profundidad, este libro es solamente del Héroe de los Susurros y el Amo del Silencio con su conflicto.

      Al principio si quería que Cian fuera un cabrón carismático como dices y no empatice mucho con él. Pero Cian es un mar de defectos, alguien que carece de aspectos fundamentales de un protagonista heroico y se me ha movido del camino que le hice a su historia y no va a poder encajar, aunque lo intente meter en dicha categoría, pero bueno ahora con el nuevo rumbo lo entiendo mejor. Con respecto a su trasfondo será tocado en capítulos divisibles por 9 exceptuando el último, si cuentas todo lo que dije sobre su pasado en la sinopsis te darás cuenta que son 9 aspectos y se verán en dichos capítulos.

      Se nota que estoy influenciado por el manga, videojuegos y novelas ligeras porque consumí cantidades enormes y cuando empezaron a dejarme vacío me fui para algo más complejo la fantasía y a la hora de escribir creo que siempre se va a notar, tratare de que sea positivamente.

      Bueno yo estoy agradecido, tu crítica ha sido la más completa, has visto a través de mi escritura y has tocado los aspectos que me servirán para aprender y mejorar, espero seguir contando con tu ayuda para futuros capítulos.

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      1. De nada, camarada, la lectura y los comentarios es lo menos que podía hacer.
        Igual, te digo que tengas calma, pero seas constante con lo de la gramática. A mi me ha tomado años irla perfeccionando, aunque vale la pena decir que no se me da muy bien, todo ha sido pura práctica.
        Mira, eso que explicas de los Ens podrías haberlo introducido en la novela durante el tiempo en el que están en el templo, cuando el viejo maestro se lo enseñara al niño o este se lo preguntara. Es un infodump, pero a muchas personas les será difícil comprender tu sistema de magia si no los ayudas de esta manera, recuerda que pocos saben tanto como tú, que eres el creador.
        El problema del consumo de manga, videojuegos y novelas ligeras, es que está dirigido a un público adolescente y, la mayoría de las veces carece de la seriedad, realismo y dramatismo que requiere escribir fantasía. Incluso si escribes para un público adolescente, tienes que tener en cuenta ciertas cosas.
        Por lo de los extractos a comienzo de los capítulos no te preocupes, Sanderson se lo copió a otros escritores. Lo que es un tipo de técnica que se usa cuando son libros grandes o sagas, variando siempre las fuentes y muchas veces sin explicar que relación tiene con el capítulo que vas a leer.
        Ahora, con calma, termina este borrador y después siéntate a corregirlo, que es lo que mejorará tu novela.

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        1. Ok tendré en cuenta todo lo que me has dicho y lo iré poniendo en práctica de poco a poco. Creo que tendré que hacer una escena como esa que me dices para poder explicar los Ens y así los lectores no se pierdan de lo básico. Que más adelante vienen usos más complejos de la magia partiendo de sus bases y quiero que se entiendan. Me puse analizar la escena de Cian enfrentando al silencio por primera vez y a pesar de no ser silencio absoluto es una situación muy similar. Por lo que es posible que cuando la rescriba Cian experimente algunas alucinaciones como me recomendaste.

          Tendré muy en cuenta los problemas del consumo de manga, videojuegos y novelas ligeras para que no afecten en lo que escribo en aras de una mejor calidad y profundidad en la novela. Así que Sanderson no es el único autor que hace eso, me gustaría conocer otros libros de autores que usen extractos a inicio de los capítulos, es una técnica de lo más interesante y que puede usarse de múltiples formas.
          Bueno nuevamente muchas gracias por todo, solo queda seguir avanzando en el borrador mientras voy aprendiendo sobre la escritura.

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          1. Los dos principales y, mejores ejemplos que se ocurren ahora mismo del uso de los extractos a comienzos de los capítulos es Malaz de Steven Erikson y Ian C. Esslemont y todas las sagas de fantasía de R. Scott Bakker.

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  2. Conteo de palabras: 2477
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    “Cuando llegamos por primera vez a esta tierra huyendo de nuestra extinción presenciamos un amanecer tan rojo como la sangre y tan oscuro como un abismo sin fondo. La calamidad nos había seguido hasta aquí”

    Fragmento de Crónicas de un Último Viaje, un diario dañado y resguardado por la Iglesia que narra sucesos anteriores al año 0.

    Capítulo 6: Iluminada.

    Año 991 Etapa Dorada Cima 2

    Dicen que en Amanecer Oscuro no existe ciudad más deslumbrante que esa que se encuentra tras la Cordilleras de los Olvidados, rodeada entre los Bosques Atrapalmas y el Mar Percutor. Brillante y única, esa es la afamada capital del Reino del Sol. Una metrópolis que siempre amanece llena de personas atareadas. Repleta de comerciantes, inventores y objetos exóticos que vienen de todas partes del continente. Abarrotada de eruditos y aprendices que buscaban los nuevos y viejos saberes al entrar en la Gran Biblioteca. Cada tramo de sus adoquinadas calles irradia limpieza, riqueza y sabiduría. Este sitio no solo es considerado el centro del conocimiento y la invención, sino una ciudad tan deslumbrante que ninguna de sus costas necesita faros. Su brillo la rodea desafiando a las noches más oscuras sirviendo de señal incluso a pueblos e islas cercanas. Por eso era conocida por todos por el nombre de “Iluminada”.

    A Jade no le agradaba.

    Aunque se encontraba mucho mejor que antes, con comodidades y trabajando nada menos que en el Palacio Azul. No podía sentirse más fuera de lugar. La banda la había educado todos estos años para que fuese una noble. Ahora todos se habían ido de aventuras y la habían dejado a cargo de las responsabilidades de la casa Mercur. Maldición que aburrido. Le había tomado buena parte de la madruga analizar un error que hubo en el papeleo de los tratos comerciales de la familia.

    Ahora a primera hora de la mañana con unas ojeras que la gran mayoría consideraría impropios de una dama salió con un aparatoso vestido verde hacia su otra responsabilidad. Aunque bueno no era raro ver a gente cansada hoy en día, no con ese extraño suceso que hizo que toda la población padeciera de pesadillas por varios días seguidos. Menos mal que ya había acabado, fuese lo que fuese. Pero ahora ella no podía ni asomarse a la ventana del carruaje a mirar la ciudad, sus guardaespaldas se lo tenían prohibido y estaba en la molesta situación de aceptar. Sabía que era la única Mercur en la ciudad, la protegida del Héroe de los Susurros.

    Luego de un largo rato escuchó la verja de palacio abrirse. Ya estaba acostumbrada a su leve sonido. Quiso echarle un vistazo al jardín y su mayordomo-guardia-tutor en resumen el hombre multiusos James no dijo nada y siguió leyendo su libro desde el asiento de al frente. Que mal le caía al viejo.

    Tulipanes, rosas, jazmines y otras flores que Jade desconocía hicieron eco de su grandeza. Si había un jardín más completo y deslumbrante en todo el continente ese era el del Palacio Azul. Los patrones que dibujaban sus plantas, flores y arboles eran toda una obra de arte desde el suelo y desde lo alto era como contemplar un cuadro. Las aves e insectos habían sido cuidadosamente seleccionados para dar musicalidad y gracia a la obra. Estaba tan perfecto que incluso los olores y fragancias seguían un patrón de ensueño que ha Jade le gustaba respirar ese olor…achís

    Maldición

    —Señorita no olfateé tanto por la ventana que se le va a meter un abejorro—Se burló James.
    —Para tu información aquello que paso ese día no fue un abejorro, fue un tipo de escarabajo y…—La sonrisa petulante del viejo la hizo sonrojarse, claro que lo sabía le estaba tomando el pelo—Maldición.
    —Creo recordarle que en las clases de etiqueta y modales llegamos al acuerdo de que no debería maldecir, es impropio de una dama—Replicó y el carruaje se detuvo en ese instante.
    —¡Al demonio las normas! —Jade le propició una patada a la puerta del carruaje que la abrió de golpe, el sirviente que la iba a abrir palideció estaba a unos escasos segundos del posible impacto—Eh lo siento.

    El sirviente se echó para atrás lleno de miedo y Jade siguió de largo sin siquiera despedirse hacia la entrada del palacio, los guardias la saludaron. El carruaje en el que vino se marchó, aunque la puerta no parecía encajar bien. James se encargaría de buscarla a la hora de siempre. Por un poco tiempo era libre nuevamente.

    El interior del palacio era igual de sorprendente y espacioso repleto de obras de artes que ya había contemplado en múltiples ocasiones. Subió por unas escaleras hacia el segundo piso y siguió avanzando. Luego de pasar por laberinticos pasillos llegó al que llevaba directo a los dormitorios reales. Jade los reconocía por el inmenso cuadro en que se veía el rostro de su majestad, un viejo gordo con bigote bastante asqueroso. Solo debía seguir recto un rato y llegaría a los dormitorios de la princesa.

    Una sirvienta pasó al lado de ella y la saludó. Jade le hizo un gesto con la mano y ambas siguieron de largo. En su mano ahora brillaban unas monedas. Obviamente fue involuntario, tenía que encontrar la forma de dejar ese hábito ya no era una simple ladronzuela. Ni siquiera las estrellas de platas que acababa de robar le servirían de mucho, ahora era una noble menor y como tal solo comerciaba con estrellas de oro.

    Contempló unos guardias con sus vistosas armaduras rojas características del Reino del Sol. Aquellos hombres llevaban unos casos con seis aberturas y dos cuernos. Una referencia al animal que adoraban, el Ciervo de Sangre. Protegían una puerta en la que había un anciano nervioso caminando en círculos sin poder entrar. Era nada menos que el consejero real Tomás.

    ––Buen día mi lord––Le hizo una reverencia, maldita etiqueta.
    ––Ho Jade pequeña, puedes dejar las formalidades––Dijo el anciano indicándole que parara––Me sentiría mal que una integrante de la casa Mercur anduviera inclinándose ante este viejo.
    ––No diga eso, usted es un noble mayor, el consejero del rey. Permítame ser formal.
    ––Como quieras, si te es más cómodo…––El anciano volvió a mirar a la puerta.
    Ese sonido que salía de ahí. ¿Eran gemidos y gritos de mujer? ¿Están teniendo sexo ahora? Jade se percató en que era una de las tantas habitaciones del placer de la corona. Se ruborizó.
    ––Chica mejor nos vamos de aquí, no parece que su majestad vaya a acabar ahora––El anciano comenzó a caminar a su lado.
    ––Faltan pocos días para la cumbre de los reyes––Comentó Jade intentando calmarse un poco.
    ––Por qué crees que estoy aquí muchacha, el rey necesita prepararse, es un evento imprescindible en los tiempos que corren actualmente—El consejero negó con la cabeza—Como puede seguir en eso desde ayer.
    ––¿Esa de allí es la esposa de lord Jun? ––Preguntó Jade lanzando una mirada hacia la habitación que habían dejado atrás.
    ––Si, el ritual parece continuar
    Jade entornó la mirada.
    ––Encuentro las costumbres del reino tan peculiares como de costumbre––Dijo forzando una sonrisa.
    ––Y que lo digas, espero que no haya más casamientos en una buena temporada––Contestó el consejero dejando escapar un suspiro—Sino esteremos perdidos.

    Claro que Jade se sentía fuera de lugar. Una de las costumbres del reino del Sol era venerar a su rey como una especie de enviado de dios para unificar a los mortales sin importar que tan imbécil sea. Ah y eso de unirlos es en varios sentidos de la palabra. Si ocurría un casamiento de uno de los miembros de los nobles mayores del reino. El rey pasaría la primera noche con la esposa para crear un lazo irrompible en la pareja. Los nobles lo usaban por tres razones. Adoración extrema, verificar la castidad o voluntad de la pareja actual, lo cual puede anular el matrimonio y buscar una posible descendencia real que les permita mejorar su posición en la competición por la corona.
    Jade se sentía asqueada solo de pensarlo.

    ––Me temo que mi camino difiere del suyo de aquí en adelante––Dijo Tomás al ver que Jade parecía seguir de largo.
    ––Si necesito ir y organizar algunas tareas para la princesa––Contestó Jade.
    ––Ya veo ¿segura que no quieres que te apunte en la lista para viajar hacia la Cumbre de los Reyes? ––Pregunto el consejero––Es un evento que solo ocurre cada 10 años, una experiencia memorable para una señorita y posiblemente la última oportunidad.
    ––Gracias, de momento estoy ocupada, te avisare si cambio de parecer––Dijo Jade y le hizo una reverencia.
    ––De acuerdo, te hare un espacio en la lista si cambias de parecer––Dijo Tomás inclinó un poco la cabeza y se marchó en dirección a la sala real.

    El viejo le caía bien. Tal vez un viaje como ese al centro del continente la ayudara a relajarse y ver nuevas tierras. Rayos, el mundo se iba a acabar, debía aprovechar bien su tiempo. Pero la princesa parecía querer quedarse y ella como su única ayudante, debía permanecer en Iluminada.
    Faltaba poco para llegar. Mientras proseguía en su camino los pasillos dejaban entrever la magnífica arquitectura que la rodeaba. Toda los interiores y exteriores usaban tonos azul claro. Los techos en palacio eran altos y emulaban un arco. Las losas de piedra pulida le daban un toque impecable al piso. Jade todavía se maravillaba de los diferentes que era el Reino Nevado de su actual ubicación. Miró por la ventana mientras seguía avanzando y exhaló un suspiro.

    Extrañaba la nieve eterna. Posiblemente lo único que recordaba con cariño de su tierra natal. Don su vigilante alado ahora vivía en un pequeño agujero en un árbol en el patio de palacio. Se estaba comportando mejor que cuando llegaron por primera vez, pero ya no era blanco, curiosamente había mudado sus plumas a un color marrón oscuro.

    Se acercó a una habitación con soldados apostados en la puerta. Los guardias la miraron y saludaron. Le dejaron entrar. La princesa parecía acabar de levantarse y tenía una sirvienta vistiéndola detrás de una pequeña cortina.

    —Buenos días señorita Destello traigo la lista con todas sus obligaciones de hoy––Dijo Jade.
    —Buenos días Jade––Salió la princesa ya cambiada, le dirigió una mirada a la sirvienta—Puedes retirarte.
    ––Pero mi señora no he terminado de arreglar su cabello.
    ––Tranquila yo me encargo del resto––Le contestó la princesa y la sirvienta se inclinó y salió por la puerta.

    Se quedaron a solas en la habitación.

    —Ay mi querida amiga te ves muy cansada—Destello la miró de arriba abajo y negó con la cabeza—Creo que te voy a revelar como mi ayudante por unos días, corren tiempos difíciles y necesito que cuides más de ti.

    Jade no sabía que decir una vez más se quedó muda al contemplar la amabilidad de la princesa. ¿Cómo podía ser tan perfecta? Con ese tierno rostro de nariz pequeña y labios delicados en los que reposaban sus ojos azulados seguros y para nada cansados. Con esa melena dorada que le llegaba hasta la cintura y ese busto prominente que envidiaba. Comparada con ella no era nada, era la única persona que quiso ser su amiga en toda la ciudad y eso la había hecho apreciarla aún más.

    —¿Oye me estas escuchando? Cielos de verdad que estas muy cansada—Dijo Destello con brazos cruzados
    —No es nada, es mi responsabilidad debo…
    —Nada de eso, te tomaras los días que crea necesario, te estas descuidando mucho.
    —Bueno supongo que gracias—Jade sabía que no se podía llevar la contraria a la princesa cuando estaba tan decidida.
    —Tranquila—Sonrió Destello— ¿Por cierto no ha llegado ningún mensaje de lord Cian?
    —No, nada—Jade sabía cuanto le gustaba el héroe a la princesa, se le veía en los ojos.
    —Sabes estoy celosa de ti siempre lo ves cuando viene, pero rara vez él se pasa por acá o me avisas—Dijo su amiga—¿Acaso te gusta?
    —¡No! Nada de eso, es solo que estoy en su banda—Dijo Jade velozmente agitando los brazos en señal de negación—Me gusta otra persona.
    —¿Segura, nunca me has hablado de otra persona? —Preguntó Destello mirándola fijamente lo que hizo que Jade se sonrojara, luego le dedico una sonrisa—Tranquila solo te estoy tomando el pelo.

    Jade solo le dedicó una sonrisita nerviosa ante el delicado reír de la princesa.

    —Pero señorita Destello, quisiera ayudarla de todas formas así que si tiene algo que pueda hacer por usted en ese tiempo que no voy a estar a su cuidado
    —Eres muy trabajadora y testaruda veo que tendré que ponerte a hacer algo de todas formas ya que no quieres las vacaciones—La princesa parecía un poco pensativa—Bueno puede que si necesite que hagas algo después de todo.
    ––¿Si? ––Preguntó Jade.
    ––Mis espías me han entregado una información un tanto inquietante––Dijo mientras caminaba por la habitación––Al parecer alguien intenta robar en la bóveda real.
    ––Existe demasiada seguridad haya abajo––Jade frunció el ceño––Es prácticamente casi imposible que roben algo allí.
    ––Ya lo dijiste, no es imposible
    Jade se mordió el labio. Debería hablar menos.
    ––No es necesario que te pongas nerviosa, sé muy bien que antes de pertenecer a la casa de Cian era una ladrona––Dijo Destello en un tono que a Jade no le pareció adecuado.
    «No me gusta el rumbo que toma esta conversación»
    —No te preocupes sé que has cambiado y trabajado duro—Explicó Destello—Pero en estos momentos agradecería que usaras tus antiguas habilidades para atraparlo.
    Jade no se podía creer que le acabaran de pedir eso.
    ––No sé si estaré a la altura de la tarea, pero daré mi mejor esfuerzo—Pero obviamente se lo había buscado, no podía negarse.
    ––Lo estarás estoy segura––Sonrió la princesa––Afuera en el patio encontraras 2 agentes que te ayudaran en tu tarea, cuento contigo Jade, espero buenas noticias.
    ––Así será—Jade le hizo una reverencia en señal de despedida y se marchó al corredor.

    Definitivamente esa misión y ese tono final que uso la princesa la irritaban. Aun algunos nobles la veían como una sucia ladrona, pero su amiga Destello nunca se había expresado así con ella, pero seguro que no lo hizo con mala intención ¿Verdad?

    Jade miro su mano y saco de sus bolsillo u colgante con un precioso rubí. ¿En qué momento había robado aquello de la habitación de la princesa? Posiblemente lo hizo inconsciente. Lo devolvería más tarde para que no inculparan a ningún inocente. Tal vez sus amigos tenían razón y la princesa se había percatado de su habilidad para el robo. Era evidente que no podía negar lo que era.

    Al menos al acercarla a la bóveda le habían puesto mucho más fácil la tarea que ocultaba, su verdadera misión.

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    Los susurros dotan, el silencio quita.
    (Proverbio Popular)

    Capítulo 5: Una pequeña esperanza.

    La ceniza y el fuego opacaban la vista. Un dragón gigantesco de color carmesí estaba quieto contemplando su obra. El pueblo había sido aniquilado. La bestia se acercó a un niño que sujetaba fuertemente a un bebé cuyo llanto sonaba espeluznante junto el sonido de las brasas. Sus miradas chocaron y se dedicaron una sonrisa. La del lagarto maliciosa, la del chico repleta de lágrimas de felicidad. Se oyó un ruido seco. El llanto del bebé fue silenciado y un líquido rojo se desparramó en el suelo.

    Yagek se levantó de un brinco.

    Se sentía realmente mal. Llevaba varias noches con pesadillas todas relacionadas al Antiguo, desde el día antes de la muerte de Demo se habían repetido una y otra vez. El viejo no le caía bien pero nunca se imaginó que moriría de un ataque al corazón. Tenía que tranquilizarse. Que la diosa Silenuvis lo guie en el más allá. Vio como las antorchas de piedra comenzaban a iluminarse marcando el inicio del día. Esos malos sueños tenían que significar algo de su pasado. Tenía miedo de saber, no quería recordar, seguro que iba a ser doloroso. Vio una bandeja al lado de su cama. Una hogaza de pan duro y un poco de jugo. El menú habitual. Pero aun así sabía que era lo que había, debía estar agradecido. A su lado había una nota: «Prepárate, nos largamos de aquí»

    El chico se tragó el desayuno lo más rápido que pudo y salió de la habitación. No necesitaba prepararse. Lo que llevaba puesto era lo que había traído y era con lo que se marchaba. Ya no se perdía en los pasillos como antes, así que no tardo en subir y salir. Apenas dio un paso afuera el brillo del exterior lo deslumbró. Sus ojos tardaron un poco en acostumbrarse. Cuando lo hicieron vio a Cian sentado junto al bolso donde guardaba las pertenencias. Estaba donde había enterrado a su maestro.

    La tumba era simple, una zona abultada en la tierra marcaba donde se había colocado el cadáver, a unos 4 metros más o menos hacia abajo antes de volver a rellenar el agujero. Sobre la zona reposaba una tabla de madera a la cual se le habían clavado otros trozos para formar un asterisco, una estrella. Un lugar un poco cercano al borde del precipicio con una gran vista a la llanura muerta y desértica que brindaba como paisaje.

    —Vaya ya te has levantado, ven acércate—Le dijo Cian ¿cómo lo había sentido si todavía estaba de espaldas? Estos Ens y sus cosas raras.
    —¿Que le pasará a este lugar ahora? —Preguntó Yagek.
    —La iglesia mandará a otro guía a sustituir a Demo, ya no pienso regresar más a este sitio así que no creo que lo vaya a conocer—Miro con nostalgia la tumba una vez más—Esta será una despedida definitiva.
    —¿Por qué? ¿simplemente lo van a sustituir? La iglesia a la que pertenece no debería realizar algo en su honor, una visita.
    —Vivimos en un mundo que trata a todos como criaturas desechables, no importa quien seas siempre hay alguien que puede remplazarte, así es y así se mantendrá—Contestó Cian.
    —¿Incluso el Héroe de los Susurros es desechable?

    Cian le dedico una sonrisa amarga.

    —Hace 10 años puede que sí, pero ahora estamos en la última década antes de que nuestro mundo muera según la iglesia, supongo que soy el último Héroe de los Susurros que habrá—Cian se quedó callado por unos instantes— Tampoco ayuda el hecho de que los susurradores sean tan escasos. Si muero la destrucción será más rápida y el Amo del Silencio aniquilará toda la existencia, no habrá necesidad de esperar el año 1000.
    —¿El Amo del Silencio es así de malo?

    Cian se volteó bruscamente con los ojos como platos. ¿Acaso le había dicho algo raro? Parecía que le iba a decir algo, pero se arrepintió y volvió a mirar la tumba de su maestro. Tal vez la malignidad del Amo del Silencio es algo de conocimiento común. Un saber que había perdido gracias a su amnesia.

    —Bueno creo que nos vamos—Dijo Cian el cual desde la muerte de su maestro raramente ya no se veía tan alto ni fornido como antes.
    —¿A dónde?
    —A la tierra del Coloso de la Guerra, el Reino del Sol—Le respondió mientras se levantaba y le echaba una mirada a la impotente estatua que les brindaba sombra.
    Era una estructura increíblemente detallada de una especie de sacerdote con una vara. Su altura era un poco mayor que la de la cúspide de la meseta. Toda una obra de arte en este páramo vacío.
    —¿Coloso de la guerra? —Preguntó Yagek confuso.
    ––Primo de este que tienen aquí. El que tenemos delante es el Coloso de la Supervivencia junto a otra estatua similar constituyen una de las 9 maravillas de la Edad de Piedra––Le explicó Cian —Es una lástima que se encuentre varado aquí.

    Cian se sacudió el polvo de su armadura de cuero, dicha acción no le sirvió de mucho dado lo sucia que estaba. Cogió la bolsa de las pertenecías se la echó al hombro y empezaron a acercarse a la escalinata.

    —¿Y que hace una de las maravillas del mundo en este desierto? —Preguntó Yagek.
    —Sabes este lugar no se llama el Valle del Silencio porque sí. En el pasado existió un reino aquí, incluso tenían un bosque encantado y todo. Este monumento formaba parte de aquella maravilla—La expresión de Cian se ensombreció—Pero hace 300 años la guerra contra el Amo del Silencio volvió a estallar y él silenció la vida misma en todo este lugar durante la batalla final.
    —¿Pero y la estatua como sobrevivió y se mantuvo en tan buenas condiciones? —Preguntó Yagek que no podía creer que todo un reino fuese borrado tan fácil.
    —Está hecha de piedra rúnica. El material más duro conocido, prácticamente irrompible—Explicó Cian––Uno de los mayores misterios que carcomen la cabeza a los eruditos e historiadores es que si nos es actualmente imposible tallarla, entonces ¿cómo nuestros antepasados lo hicieron en la época de piedra?
    —Habrán sido Ens, no hay que pensarlo mucho
    —Esa no es la respuesta de todo, ningún Ens es tan poderoso como para eso¬¬ —Sonrió Cian, luego se lo pensó mejor y siguió hablando —Las antorchas de piedra son de piedra rúnica, el monumento del Calendario Circular también. Son tecnologías increíbles a lo mejor los Ens de antes sabían algo que hemos perdido.

    El viaje no hacía más que iniciar y ya a Yagek le dolían los pies. Bajar la escalinata había sido más fácil que subirla, pero la inmensidad del valle le parecía desalentadora. Sin embargo, no podía parar debía seguir a Cian. Todo le parecía nuevo y misterioso quería aprender todo lo que pudiese. Pero no recordar. Las imágenes de sus pesadillas volvían a florecer en su mente.

    —¿Pasa algo?
    —No nada—Respondió elevando la vista hacia el héroe —¿Alguna vez este sitio volverá a tener vida?

    Cian lo observó parecía haberse dado cuenta de que no quería hablar del tema así que le siguió la corriente.

    —Con el fin del mundo que se nos viene arriba todo parece indicar que no—Cian volteo la mirada atrás a donde está el coloso, en dirección a la cima de la meseta, hacia el pasado—Pero eso no significa que no lucharemos hasta el final.

    Yagek no entendió la frase, pero asintió. Siguieron por el Valle del Silencio hacia el horizonte.
    En la cima de una meseta rocosa justo en el borde a la sombra de un coloso, ahora había una rústica sepultura. A su lado un pequeño brote de hojas verdes desafiaba el terreno y se mecía con un vaivén que parecía indicar una despedida, un nuevo comienzo, una pequeña esperanza.

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  4. Bueno como verán no he podido lograr superar el reto del Nanowrimo, no llegué a la 30k palabras. La experiencia ha sido de lo más interesante, bastante buena. Adquirir disciplina es fundamental para un escritor así que debo aprender gestionar mejor mi tiempo, estudio y distracciones. Seguiré subiendo los capítulos de Susurros Heroicos por acá hasta concluir el borrador, muchas gracias a todos.

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    1. Lo importante ha sido participar camarada, sigue publicando y completa el borrador pero no te preocupes pues el objetivo siempre ha sido difundir nuestro trabajo, obtener feedback y si el evento te ayudó a ponerte a prueba cumplió su objetivo. Tienes un buen proyecto, solo tienes que seguirlo sacando adelante.

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    2. Hola Gren. Pienso que más allá de lograr o no X cantidad de palabras el reto va también de demostrarnos que sí es posible lograr sacar un borrador, o al menos la ‘espina dorsal’ de una historia, volcarnos en ello amén de la vorágine diaria,responsabilidades, etc.. Felicidades pues, 😊 y feliz fin de año!

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      1. Así es Gamora tienes la razón. Lo que queda es avanzar para sacar esa espina dorsal de la historia. Muchas gracias, espero que hayas tenido un buen fin de año y ¡Feliz año nuevo!

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  5. Cierto el metal podría ser muy frágil, tal vez una cota de mallas seria más efectiva en esas situaciones, sigue siendo metal, pero creo que aguantaría más. Hay que ver que piensa el creador.

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  6. Conteo de palabras: 2175
    Conteo de palabras total: 10 086/ 30 000

    “(…) La esencia es una energía no me cabe duda, debería empezarse a estudiar como una fuerza que está presente en cada cosa del universo. Con el conocimiento adecuado estaría al acceso de todos y no será monopolizada por los Ens. Nos permitiría hacer cosas imposibles, nos permitiría llevar nuestra civilización a eras gloriosas. Solo la consideramos mágica por no conocer sus bases, solo la llamamos divina por estar fuera de nuestra comprensión (…)”
    Discurso dado por el erudito Xam Tayros en el reino del Sol, tales blasfemias no tardaron en llevarlo al destierro y a ser maldecido por los dioses.

    Capítulo 4: Un Ens completo

    La sangre encharcada en el suelo, manchaba las sábanas y paredes de la habitación. El cuerpo muerto de Cian se encontraba al frente de su asesino quien llevaba 10 largos minutos sin apartar la mirada, sin bajar la guardia.

    El tiempo corría, pero aquella figura seguía acechando al cadáver con sus ojos dotados de un brillo carmesí que sobresalían a través de su máscara. Algunas partes de su ajustado traje parecían salpicadas de rojo, pero no tanto como sus guantes con los que agarraba con firmeza el puñal que goteaba sobre el piso al lado de sus botas.

    Una brisa susurrante se extendió por la habitación, el asesino se lanzó hacia atrás justo a tiempo, el filo de una hoja ahuecada paso muy cerca. Obviamente en un lugar tan hermético como ese no iba a hacer viento, eso le había advertido del peligro.

    La Hoja Cantora lanzó una tonada musical al terminar el golpe. Cian la sujetaba con sus manos. Detrás de él se encontraba su otro yo, muerto. El cadáver se desvaneció en forma de polvo luminoso que el héroe se encargó de absorber con su cuerpo. Algo se sentía diferente, ya no era tan alto volvía a ostentar la altura promedio que tenía antes de ser un Ens, su piel estaba pálida y sudorosa. Su respiración era agitada, dolorosa y pesada.

    —¿Qué quieres, acaso te envía dios? —Preguntó Cian y sus brillantes ojos no tardaron en enfocar a su adversario, era unos de los pocos Ens que veían en la abismal oscuridad su mirada lo delataba.

    El asesino permaneció en silencio. Obviamente no iba a conversar, era listo. Pero todavía podía intentar provocarlo.

    De la espalda de Cian nació una luz que trazó líneas que formaron otras luces hasta que se formó una figura que sobresalía detrás. Era la llamada constelación de los ENS la única habilidad estética que todos compartían, la cual como si se tratase de un ave que exhibe sus plumas para buscar pareja o alertar a otros de su especie, demostraba su fuerza. Seis estrellas formaban un inusual hexágono que tenía una de sus líneas superiores hacia el centro, hacia un vacío. Ese vacío era la séptima estrella que solo saldría al despertar su última esencia.

    Su enemigo ni se inmuto. No le mostró su constelación en señal de honor antes del combate, mucho menos intentó persuadirlo o se hecho hacia atrás al verla. Simplemente esperaba el momento oportuno de ir por su vida.

    —Eres un creador, lo sé por los anillos y brazaletes que llevas, es raro que uno de los tuyos se vuelva asesino—Dijo Cian esperando conseguir algo más de tiempo, después de todo el sujeto que se encontraba ante él había inutilizado una de sus 6 habilidades, tardaría varios años en poder fragmentar su existencia para tener un doble que muriera en su lugar, al acabar de perderlo el dolor que aguantaba era insoportable y podía morir de verdad si luchaban.

    Uno de los anillos del asesino explotó y apareció una espada larga en su mano. Un objeto físico, una esencia del tipo cuerpo. Cian temía que la otra naturaleza del Ens que se mostraba ante el fuera la mente, estaría acabado en dicho caso, pero ya no dudaría haría lo mejor que pudiera como siempre lo había hecho.

    El verdadero combate comenzó.

    Se abalanzaron el uno contra el otro sus espadas chocaron varias veces mientras se movían sin darse chance. La Hoja Cantora se movía a una velocidad vertiginosa mientras producía su melodía que fortalecía a quienes estaban acostumbrados y doblegaba a los que no. Cian se comenzó a sentir mejor, pero algo iba mal, su adversario no parecía afectado por la música.

    «¿Acaso es alguien que conozco?»

    Pocos habían entrenado con él, solo el tonto de su hermano podía fortalecerse cuando se le atacaba con la hoja cantora, ya había tenido muchos duelos con él. Pero dudaba que el odio que profesaba sobre su persona lo llevara a matarlo. Después de todo seguían siendo familia. La otra opción era que una de las esencias de su enemigo evitara que escuchara la Hoja cantora.
    La espada de su enemigo le hizo un corte superficial y siguieron atacándose. El creador le lanzó un pequeño taburete de una patada que no tardó en estallar en tozos de astilla ante una tonada de Cian. Seis dagas que aparecieron en el aire alrededor de su enemigo comenzaron a abalanzarse sobre él.

    Cian susurró. Las palabras incomprensibles le dieron fuerza, agilidad era su esencia más débil, su pétalo inferior. Siguió susurrando esta vez uso la esencia de su pétalo medio inferior, ondas invisibles salieron de su cuerpo y comprendió mejor todo. En efecto la esencia de su hoja cantora estaba siendo convertida en energía que absorbía su enemigo por una bruma imperceptible alrededor del cuerpo. Ya tenía la otra naturaleza de la esencia de su enemigo, era ambiente.
    Una de las dagas casi le rebana el cuello por estar distraído. Por suerte era la última, no tardó en caer al suelo. Las espadas chocaron y centellaron una al frente de la otra. Con su cuerpo fortalecido Cian pateó a su adversario que salió disparado contra una de las paredes, el golpe lo arrodilló en el piso y lanzó su arma lejos de él.

    Una oportunidad. Cian se abalanzó peligrosamente para acabar con su enemigo el cual levantó una de sus manos temblorosas de dolor. Una intensa luz apareció delante de Cian y lo cegó. De la más profunda oscuridad a la luz más intensa todo pasó en un segundo. Era algo creado en la nada, algo que lo había afectado enormemente.

    «Mierda, ¡maldita sea! debí seguir usando el susurro de analizar el ambiente»

    En efecto, solo así podría sentir la esencia de su enemigo acumulándose ante el antes de estallar en forma de luz. Cian se frotaba los ojos con violencia. Un dolor punzante y súbito apareció en su pierna, su pecho, mejilla y luego hombro izquierdo. Cuando regresó su visión notó como en su cuerpo había sido atacado con virotes de ballestas de las cuales 3 lo atravesaban.

    Su enemigo volvió a disparar, Cian esquivó. Susurró como quien lanza un insulto y el cuerpo de su rival fue empujado hacia él con brusquedad. El último de sus anillos estalló y apareció una espada corta en las manos de su adversario. La estocada fue difícil de esquivar, para ello la atracción de su susurro tuvo que parar.

    Los espadazos y feroces golpes continuaron en una mortal danza. Los cortes no se hicieron esperar y la sangre de ambos comenzaba a teñir sus hojas. Cian sabía que parte de su suerte se lo debía a que estaban en la etapa dorada, en esta época del año la esencia de los susurradores es un poco más poderosa que la de los creadores. Pero dicha ventaja aparentemente efímera había equilibrado un poco las cosas. Algo iba mal, sus manos estaban entumecidas y sus sentidos embotados.

    «No me digas que las armas y virotes estaban envenenados»

    La risa grosera tras la máscara de su enemigo se lo confirmó. El susurro que Cian usaba para regenerar su cuerpo podía borrar el veneno, pero usar ese pétalo medio inferior consumía una cantidad abismal de esencia y ya le quedaba poca, lo sabía. Si se quedaba sin esencia moriría, si el veneno se le regaba en todo su cuerpo moriría, si perdía más sangre moriría. Se le acababan las oportunidades y su adversario todavía estaba repleto de poder. Solo le quedaba algo por hacer. Continuo el combate, pero cada vez los movimientos de Cian se volvían más torpes y el enemigo estaba al punto de terminar su trabajo.

    Cian resbaló con un pequeño charco de sangre. La espada de su rival lanzó un estoque mortal. Cian empujó contra la pantorrilla de su adversario usando su susurro para atraer hacia él. El enemigo se desequilibró, su estocada atravesó todo el antebrazo del héroe mientras este abalanzaba su brazo atravesado hasta la empuñadura. Agarró al fin la mano de su asesino con su brazo herido, en su otra mano la hoja cantora embistió hacia delante atravesando el abdomen del asesino.

    Nada le brindó más satisfacción a Cian que el sonido de su espada rasgando las entrañas de su enemigo, cortando al ritmo de una melodía que reventaba los órganos del asesino mientras iba hacia arriba y salía por su hombro. A Cian siempre le había gustado el filo sobrenatural que tenía su arma a la hora de cortar seres vivos.

    «He ganado»

    Casi no se lo podía creer. Cerró los ojos y comprobó sus reservas de esencia. No tenía casi nada, a duras penas le daba para eliminar el veneno. Eso es lo que hizo, susurró y se sintió mejor al quitarse toda esa sustancia nociva de su cuerpo. Todavía quedaba lidiar con el sangrado y el fuerte dolor de cabeza. ¿Podría pedirle más esencia a Dios para terminar de curarse? Seria tedioso, pero no le quedaba de otra. Aunque mejor se ponía a buscar un vendaje y unos analgésicos por si acaso.

    El asesino se retorcía en el suelo, estaba a punto de morir. Una sonrisa maliciosa recorrió el rostro de Cian. ¿Cuánto tiempo podría mantener con vida a su enemigo mientras disfrutaba de su dolor? Se disponía a averiguarlo.

    La máscara del asesino se rompió, los cabellos se cayeron y su tamaño se encorvó. Los brillantes ojos carmesí adoptaron un color vino y las arrugas florecieron.

    ¡Era el viejo Demo!

    —¿Maestro? —Cian cayó de rodillas ante el moribundo —¿Qué significa esto?
    —Ah…hijo has crecido maravillosamente—El viejo tosió sangre
    —¿Por qué? —Incluso le había ocultado ha Cian que era un creador todo este tiempo, el héroe sintió como todo se desmoronaba a su alrededor ¿Cuál era la verdad?

    Cian comenzó a usar su esencia para regenerar a su maestro, no le quedaba suficiente y lo sabía.

    —Eres el primero en completar la prueba, pensé que nadie lo lograría…aunque bueno tal vez me estoy volviendo viejo—Murmuro sin fuerzas el anciano
    —¿Por qué? ¿Por qué? ¡Maldición! —La esencia de Cian llegaba a su fin.
    —Un Héroe de los Susurros solo surge cuando mata a su mentor y ha tenido experiencia contra el silencio, es una profecía, una verdad de tantas mentiras
    —¡Maldita Iglesia con sus cuentos, maldito mundo de mierda! —Gritó Cian desesperado si consumía más esencia moriría— ¡Dios ayúdame!

    Pero dios no se mostró ante su suplica. Siempre desaparecía cuando más lo necesitaba.

    —Tranquilo hijo, con esto la última esencia es tuya…estoy tan feliz, te pareces tanto a mi niño que también quiso ser héroe…yo siempre te apoyaré, aunque ya no esté—Los ojos del anciano expulsaron unas lágrimas y murió con una sonrisa.

    Cian estaba devastado.

    DIME CIAN ¿QUÉ TE PASA AHORA? OH VAYA, PERO SI YA ERES UN ENS COMPLETO

    Escuchar la voz burlona de dios lo enojó, le hizo recordar su rabia, su odio, sensaciones que quería olvidar. Ya veía que era imposible

    —¡Oye lo que te voy a decir dios de mierda, más te vale darme esencia cuando te la pida a partir de hoy y nada de mandarme asesinos! Si te atreves yo el Héroe de los Susurros me volveré un Marcado ¿me oyes? Y este mundo tendrá un final peor del que imaginan todos ustedes—dijo Cian amenazante y con un odio inmenso

    ASÍ SERÁ, DESPUÉS DE TODO ESTE MUNDO NO NECESITA QUE SU HÉROE SE VUELVA UNA CALAMIDAD, PODRÁS PEDIRME QUE LLENE TUS RESERVAS DE ESENCIA 2 VECES AL DÍA ES LO MÁS QUE PUEDO HACER POR TI

    —Es suficiente

    La presencia de dios se desvaneció y Cian se volvió a sentir lleno de poder. Se regeneró por completo con un susurro. Ante él se encontraba el cadáver de su querido maestro, se arrodilló a su lado, lloró su muerte y gritó hasta quedarse sin voz. Ya tenía la última esencia, ya era un Ens completo.

    Esa misma noche los susurros y lamentos del héroe provocaron pesadillas en todo el mundo, la brisa susurraba espeluznantes alaridos. Ese viento del cambio recorrió toda una cueva hasta unas catacumbas, donde en un largo pasillo dorado en lo más profundo de la tierra hizo eco el dolor de los susurros. En un imponente sarcófago los ojos de un cadáver brillaron una vez más y todo ese molesto sonido, así como sus pesadillas fueron silenciados.

    Habían despertado peligros ancestrales, el Amo del Silencio regresaba una vez más.

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    Hemos llegado a la conclusión que no deben haber más Ens por descubrir. Los 9 tipos de Ens son: Creadores, Controladores, Silentes, Invocadores, Devoradores, Potenciadores, Susurradores, Cambiantes e Imitadores. Sin embargo, creo que hay variaciones muy diferentes dentro de una misma categoría que necesitan ser estudiadas con urgencia.

    Fragmentos de la investigación actual del famoso erudito del Reino de Arena “Xam Tayros.

    Capítulo 3: Anhelos.

    Año 991 Etapa Dorada Cima 5

    Cian volvía a encontrarse rodeado de oscuridad. La naturaleza del silencio consistía en eliminar ciertos aspectos existentes, esa era su esencia. No podía sentir el ambiente que lo rodeaba ni su interacción con él. Su mente tampoco era muy clara, como si la seguridad, esperanza y tranquilidad le fuesen arrebatadas por completo.

    Ya había experimentado esto varias veces en los últimos días, pero era difícil acostumbrarse. Susurró y todo se rompió a su alrededor, liberándose de esa mala sensación.

    —Bien hecho—Le dijo mientras aplaudía el viejo Demo— Prácticamente lo lograste en 2 segundos, pero todavía no estás listo, te falta la última esencia.
    —Se suponía que la iba a alcanzar cuando finalizara el entrenamiento—Le respondió Cian con tono molesto.
    —Te quedan todavía varias estatuillas con esencia silente
    —¿Aunque ya no representen una dificultad? —Preguntó Cian enarcando una ceja, su expresión se ensombreció y se llenó de inseguridad—Sabes a veces me pregunto si soy el héroe que todo el mundo espera.

    Demo lo miró y se sentó para escucharlo atentamente.

    —Siempre he deseado 3 cosas: La primera era convertirme en Ens, la segunda es convertirme en una catástrofe y la tercera destruir el mundo—Cian vio como el viejo lo atravesaba con la mirada, haciendo un esfuerzo por comprenderlo su absurda idea—Sin embargo, parece ser que al mundo no le queda mucho así que su destrucción no está en mis manos, no puedo convertirme en una catástrofe que arrase reinos ya que ese poder le pertenece al Amo del Silencio y en cuanto a convertirme en un Ens todavía no sé si de verdad soy eso o algo más.
    —Te diré algo chico para que cortes esas dudas innecesarias, sabes ¿cuantos Héroes de los Susurros han aparecido en los últimos 3 siglos?

    Cian negó con la cabeza

    —Cero. Ningún Ens del tipo susurrador alcanzó el poder del Héroe de los Susurros. Los pocos que llegan hasta donde tu estas siempre fracasan en esta última prueba—Le dijo con cierto tono de angustia en su voz—Créeme lo he visto decenas de veces.
    —Al inicio pensé que tampoco lograría vencer al silencio, casi caigo inconsciente, supongo que comprendo porque los Ens de los tipos susurradores y silentes son opuestos en el Calendario Circular—Respondió Cian mientras se levantaba junto a su maestro—De verdad crees que puedo dominar esa última esencia con un susurro capaz de volverme un héroe…de verdad a alguien tan manchado de sangre como yo dicha esencia bridará tal oportunidad.
    —Lo creo, por eso estamos aquí—Afirmó el anciano con seguridad

    A Cian se le hizo un nudo en la garganta mientras avanzaba junto a Demo por los pasillos de piedra. Ciertamente si su maestro no hubiese depositado tanta fe en él no lo hubiesen catalogado de loco y mandado al templo más alejado, en una zona muerta como era el Valle del Silencio, tratándolo como un desterrado. Ahora el con sus dudas pisoteaba la fe que le había puesto su maestro, su familia, su banda. Debía calmarse.

    —Sabes viejo, cuando este entrenamiento acabe, me gustaría llevarte conmigo a mi mansión en el Reino del Sol—Dijo Cian pausadamente—Este no es lugar para que alguien de tu edad trabaje.
    —Gracias hijo, pero creo que debo rechazar tu oferta—Respondió el anciano haciendo que Cian mostrará cara de querer protestar—Céntrate en despertar la última esencia.

    Quería decir varias cosas, pero la conversación había muerto y lo sabía. Claro que no se marcharía con él, antes el héroe debía estar completo y eso es lo que iba a hacer. Ambos se despidieron y se marcharon por lados opuestos.

    Cian iba a comer algo antes de que cayera la noche. Abrió la puerta de un pequeño comedor y se encontró a Yagek en su interior disfrutando de un jugo de frutas y una hogaza de pan mientras ojeaba un libro. La caratula decía “El Antiguo, un dragón inmortal” vaya mierda de lectura.

    Se acercó a la mesa y tomó un pan de la cesta y se sirvió un poco de jugo en un vaso cercano. Lo probó sintió un ligero toque acido junto a la dulzura de la bebida, jugo de Fiyi hizo una mueca. No era mucho, pero era el alimento que podía darles Demo, preparado en la cámara más profunda del templo. Bueno sin dudas era mejor que el filete de rata sin sal que se zampó el otro día.

    —Y bien Yagek, veo que anduviste por la biblioteca y te llevaste una mier…inusual lectura
    —Quiero conocer todo acerca de la bestia que destruyó mi pueblo, aunque puede que haya perdido mis recuerdos para siempre esa noche, debo aprender sobre ese ser, tengo que acabarlo—Le dijo él niño con el brillo de a venganza en sus ojos.
    —Bien, es un buen objetivo yo también tengo asuntos con ese lagarto si quieres podemos ir a cazarlo cuando crezcas—Dijo Cian y vio como el chico parecía considerar la idea—Pero nunca vas a poder con él si te lees cosas que en vez de dar información útil lo alaban como un ser inmortal.

    El niño asintió y continuaron charlando mientras comían. Cian le estaba cogiendo cariño, una mala costumbre suya, sabía que no debía hacerlo.

    Al terminar fueron hacia la habitación de Yagek. Debía asegurarse de que estuviese limpia. El otro día lo había ido a ver y se encontró todos los desperdicios en una esquina en la cual también había orinado. Esta vez estaba limpia, menos mal. Cian se marchó a su dormitorio no sin antes recordarle al chico el agujero de la sala de al lado a la cual debía lanzar los desperdicios de la bacinilla que se encontraba debajo de la cama. No estaba para que el viejo Demo le volviese echar la bronca.

    La noche comenzó a caer, se notaba debido a que las antorchas de piedra comenzaban a apagarse. Cian había logrado llegar a su alejada habitación y se tiró en la cama. Tenía unas ganas tremendas de bañarse lamentablemente en este sitio solo se podía el primer día de cada quinque.

    Respiró hondo, se puso de rodillas a un lado de la cama y comenzó a rezar entre susurros.

    —Dios escucha a tu siervo, ofréceme la esencia necesaria para llevar gloria a tu reino—Dijo Cian en voz baja.

    QUE GLORIA, NI QUE GLORIA, ERES EL ENS MÁS TONTO QUE HE VISTO EN SIGLOS

    Se escuchó la voz atronadora de dios en su cabeza. Como le sacaba de quicio.

    SIEMPRE VIENES MENDIGANDO MÁS ESENCIA, TODOS LOS DÍAS, A LA MISMA HORA

    —Necesito la esencia sino no puedo hacer nada y lo sabes—Reclamó Cian intentando mantener la calma.

    EN SERIO ¿CUÁNDO FUE LA ÚLTIMA VEZ QUE CUMPLISTE UNA MISIÓN QUE TE ENCOMENDÉ? ERES MÁS GASTOS QUE BENEFICIOS CIAN

    —Dame la esencia ya te hare una puñetera misión loca de esas que te gustan antes de que el año acabe—Respondió a punto de perder la paciencia.

    ESTÁ BIEN, PERO NO TE ACOSTUMBRES Y ESPERO QUE CUMPLAS TU PROMESA (sonido de sorber) SINO YA TE MANDARÉ UNOS ASESINOS A QUE TE PASEN CUENTA DE TUS GASTOS

    —En serio, ¿Piensas mandarme más asesinos a matarme? ¿Más de los que me mandaste en el año pasado o el anterior? Y de paso se puede saber ¿qué rayos bebes cuando estás hablando con tu Ens? —Ya dios lo había sacado de sus casillas.

    DEGUSTO DE UN BUEN NÉCTAR, LAMENTABLEMENTE DUDO QUE TE GUSTE, TE HE VISTO COMIENDO MUCHA RATA ÚLTIMAMENTE. TOMA LA ESENCIA Y ANTES DE IRME TE DEJO CLARO QUE A DIFERENCIA DE TI CADA AÑO INTENTO SER MÁS PRODUCTIVO, CLARO QUE TE MANDARÉ MAS ASESINOS A POR TU CABEZA. NOS VEMOS.

    Maldito mil veces sea ese dios desgraciado. Cian se levantó de un salto y le asestó un golpe a la pared dejando una grieta mientras de su puño salía un hilillo de sangre. Respiró, cerró los ojos y verificó sus reservas de esencia, volvían a estar llena una vez más. Cuando terminara con el Amo del Silencio iba a ir a donde sea que vivieran los dioses e iba a acabar con ese ser. Ya estaba harto de mendigar esencia. Lo había consultado con otros Ens y solo el dios que le tocó a Cian parecía ser tan excéntrico. De seguro que por eso había tan pocos susurradores hoy en día. Se sentó en la calma e intentó recobrar la compostura. Las antorchas se apagaron por completo ya había caído la noche.

    Las horas pasaron y Cian parecía dormido cuando una extraña silueta se coló en su habitación.
    Sus ojos brillaban con un rojo intenso en la oscuridad. Fue tan solo en un momento. De un rápido y sagaz golpe un puñal atravesó el pecho de Cian. La sangre comenzó a saltar y el héroe abrió los ojos de golpe. Intentó quitarse, pero los golpes continuaban atravesándolo, ya era demasiado tarde. El puñal golpeó contra sus ojos, y repitió su sentencia con furia en su torso. Hasta que un charco de sangre baño todo ese lado de la habitación y el cuerpo yacía pálido y frio.

    La extraña figura de ojos carmesí miro hacia la cama. “¿De verdad estaba muerto?” parecía pensar al permanecer frente a su cadáver. Sabía que no podía haber sido tan fácil, nunca era tan fácil con los Ens o ¿sí?

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    Existen 9 tipos de Ens, cada uno tiene su opuesto y el que no sabe disfrazarse. Todos bailan un peligroso juego en el gran salón del calendario circular mientras el tiempo corre y las eras pasan hasta el final de los tiempos.

    Fragmentos de la investigación actual del famoso erudito del Reino de Arena “Xam Tayros.

    Capítulo 2: Conociendo al Silencio

    Cian se hallaba en la más profunda oscuridad. Ninguno de sus cinco sentidos le funcionaba. Lo peor de todo, su mente tampoco parecía muy clara. No sabía dónde estaba, ni cuánto tiempo había pasado. Tenía miedo de olvidar quien era o de hacer algo y terminar hiriendo a alguien sin saberlo. Se sentía impotente.

    —Dios ¿estás ahí?

    O al menos eso intento decir, pero a sus oídos no llegaron las palabras, ni sentía si las había pronunciado. En ese momento comprendió el horror de silencio.

    «Tal vez deba comenzar a susurrar»

    Cerró los ojos e intentó respirar hondo para poder comprobar sus reservas de esencia. Pero rayos, no sentía ni su respiración. ¿Y si se le olvidaba respirar? de seguro caería inconsciente o peor moriría. No podía ver cuánto poder disponía, por lo que no podía acceder a él en su actual estado, lo que lo llevaba a la situación de no poder susurrar para combatir el silencio.

    La desesperación cayó sobre su ser. No podía ver su cuerpo… ¿Estoy cayendo o sigo de pie?… y si nunca fui el héroe de los Susurros… y si mi vida no fue más que una pesadilla… o si desde un inicio su vida no fue más que el experimento de un Ens o un dios… ¿De verdad se llamaba Cian?… ¿Quién es ese? … ¿Quién soy yo?

    Sintió un escalofrió recorrer su cuerpo.

    Dicha sensación producto de su actual estado de pánico lo encontró, le mostró el camino. Al experimentarlo sintió como su cuerpo, su órganos y vasos sanguíneos se relajaban. Fue una sensación salvadora y extraña. Estaba de pie, estaba seguro después de todo no se había movido. Sintió como el acelerado latido de su corazón retumbaba a través de cada parte de su cuerpo. Se concentró en su ritmo cardiaco, el silencio no llegaba tan adentro en él.

    Se empezaba a calmar, sabía que tenía los ojos cerrados, lo presentía. Respiro hondo y a pesar de no sentir el aire sintió como su tórax se ensanchaba. Los latidos le indicaban el tiempo. Sensaciones tan básicas que son tan fáciles de olvidar cuando uno es presa del silencio.

    Pudo calmarse y ver sus reservas de esencia. Como le encantaba esa espiral color celeste con punticos brillantes y parpadeantes. Estaba con alrededor de la mitad de su poder. De la espiral haces de luz comenzaron a rodearlo en su mente. Estaba susurrando y lo sabía.

    Su cuerpo se fortaleció al doble, al triple de su capacidad. Probó un susurro diferente, su cuerpo emitió una onda y la oscuridad se empezó a rasgar. Terminó regresando a la sala vacía de antes. Espera, nunca se había ido, su mente era un caos.

    Cayó de rodillas en el suelo, estaba empapado en sudor y su respiración se volvió agitada. Sintió como le temblaban la mano que tenía apoyada al piso así que se terminó sentado.

    —Veo que en tus viajes no te has topado a ningún silente—Le dijo el viejo Demo sentado al frente en la única silla de la sala—Se agradece que no hayas llamado a tu espada y comenzar a atacar al azar, al no sentirla.
    —¿Todos los silentes son así?
    —Claro que no hijo, esta es la esencia del más poderoso de todos, derrotado hace 300 años por tu antecesor.
    —Ya veo—Respondió Cian sintiendo el alivio de que todos los silentes no tuvieran tanto poder y comprendiendo la verdadera amenaza del Amo del Silencio.
    Al observar al viejo vio en su mirada la decepción y el temor. ¿No había pasado la prueba?
    —Dime Cian ¿cuál es la naturaleza de la esencia que te acabas de enfrentar?
    —Era una esencia extraña. Su Ens debe estar especializado en mente-ambiente o tal vez ambiente-mente—No estaba seguro, siempre se mencionaba primero la naturaleza primaria del poder seguida de la esencia complementaria, pero como Cian sintió tanto su mente como el ambiente a su alrededor en igual falta no podía saber cuál era su especialización con exactitud.
    —¿Tan mal la pasaste que no te percataste? —Le preguntó el anciano y sintió como la vergüenza le inundaba— Era un Ens de esencia tipo silente, de naturaleza Ambiente-Mente, dado el estado en que te dejó si hubiese sido Mente-Ambiente te hubiera dejado inconsciente.
    El viejo tenía razón. Cian era un susurrador la naturaleza primaria de su poder era el cuerpo y como complemento el ambiente lo que le dejaba su mente expuesta a las esencias que la alteraban.
    —¿Debí de volverme un Ens de naturaleza cuerpo-mente?
    —No escogiste bien, nunca te arrepientas de lo que eres o lo que escoges, todos los Ens tienen una naturaleza que es su punto débil por eso acostumbran a formar grupos y tú ya tienes el tuyo, trata de contar siempre con un aliado que protege tu mente y en caso de no tenerlo cerca mantente determinado o huye, aunque claro eso también depende de si están a la par o alguno tiene más ascenso que el otro.

    De verdad que lo había decepcionado, el viejo le estaba recitando todo lo básico como si fuera un iniciado. Rayos, era un Ens de pétalo superior al que solo le faltaba la última esencia y lo habían dejado en ridículo.

    —Como bien sabrás, estuviste unos 10 segundos sin hacer nada parado ahí, aunque es preferible a atacar a lo loco y matar un aliado. En tu estado afectado hasta un mortal te hubiese matado fácilmente, debes repetir esto hasta que te acostumbres—Al parecer el viejo notó como no le gustó la idea ya que sonrió—Todavía me quedan 11 estatuillas más así que no te preocupes.
    Lo que le faltaba, había fracasado y tenía que repetir el proceso varias veces más.
    —Vamos, obviado tu derrota ante una esencia vencida y degrada por el paso de los siglos y que tu habitual confianza se fuera al piso…
    Y ahora luego de la clase se burlaba de él…genial
    —¿No te has olvidado de algo?
    —¡Yagek! —Cian se volteó rápidamente y encontró al niño quieto, debía todavía estar bajo la influencia del silencio.

    Fue hacia él, pero se detuvo súbitamente cuando llegó a su lado y su rostro paso rápidamente de preocupación a confusión. Allí estaba el niño, sin poder moverse con una sonrisa y expresión relajada, mientras con sus ojos cerrados estaba siendo presa del silencio.
    Como es posible que alguien se sintiera tan a gusto con la esencia de la maldad. Con el vacío de la muerte. Cian no podía entenderlo.

    —Dudas eh, el chico tiene potencial para volverse un silente de eso no cabe duda—el anciano se encontraba a su lado y lo miró con ojos sabios—Tienes que matarlo, si no en un futuro se unirá a tu mayor enemigo.
    —Que dices viejo, el Amo del Silencio lo derrotaré rápido no es como si la batalla se fuera a extender hasta que el chico se vuelva silente en unos años, ni siquiera sabemos si se quiere volver un Ens o el mundo se acaba en el año 1000—Le contestó Cian con voz cansada.

    El anciano no dijo nada. Se acercó a la puerta mientras alzaba la mano con la palma abierta en señal de “buenas noches” y se marchó. Estaba molesto y decepcionado, lo sabía.
    Cian susurró unas palabras antiguas, incomprensibles e imposibles de plasmar en un escrito. Sintió como su esencia se consumía, lo que le hizo soltar un suspiro. Le quedaba poca y no le gustaba mendigar a Dios. De una bofetada que lanzó al piso al pobre muchacho lo liberó de su trance y destruyó la energía silente que contenía.

    —¡¿Qué te pasa?!—Protestó Yagek desde el suelo.
    —Estabas siendo afectado por la esencia del silencio y te liberé
    Al muchacho pareció tomarle su tiempo entender lo que se le había dicho. Estaba un poco confundido y con una mano en su enrojecida mejilla.
    —Ya veo, no recuerdo mucho, tan solo me sentía cálido…supongo que gracias por salvarme de nuevo Cian

    El muchacho parecía regresar a la normalidad. Pero ¿calidez en el silencio? Ya estaba tan cansado que no quería ni pensar en ello. Ambos salieron de la sala a buscar una habitación donde quedarse, deberían permanecer aquí hasta que dominara su última esencia, hasta que el héroe estuviera completo.

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    1. Te había dejado un comentario en el capítulo que publicaste en cubava pero se perdió en la mudanza así que más o menos lo reconstruyo. Me leí el capítulo y como capítulo de inicio de libro da información sobre los Ens y el entrenamiento del héroe y en la fantasía en general los primeros capítulos son así. Uno trata de meter trasfondo. No tienes infodumping pero ten cuidado, estás planteando de lo que va el mundo y veo cosas nuevas como la conversación de Cian con el maestro donde hablan de los distintos tipos de Ens, me quedé analizando un poco eso ¿Forman equipos los ens para complementarse? Me gusta. Otra cosa es el niño que va a ser un silente. Aún no pillo del todo lo del silente ¿Son los antagonistas de los Ens no? Digo porque el maestro quiere que elimine al muchacho y la lucha es contra el amo del silencio. Bueno qué te digo, creo que según sigas te va a ir quedando sobre ruedas. Métele ganas camarada.

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      1. Si la verdad es que tengo que evitar sobrecargar de información los capítulos, pero es realmente complicado. Lo de matar al niño por ser compatible con los silentes es cosa de religión, ya más adelante trataré de abordar el tema de la fe y como el silencio es visto como el símbolo de la maldad. Los silentes al igual que los susurradores son tipos de Ens, opuestos en el círculo que forma el calendario, seres con poderes contrarios destinados a matarse por tradición y religión. Entonces cada cierto tiempo aparece el Amo del Silencio el silente más poderoso con deseos de destruirlo todo o eso cuentan las historias y entonces le toca a su opuesto el susurrador más fuerte, el Héroe de los Susurros vencerlo. Gracias por la lectura y si ves algo que no te gusta o no entiendas me lo dices sin pena para saber donde mejorar.

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        1. Ok, así lo haré. Lo de poner mucho trasfondo es algo de la fantasía en general. Limyaeel tiene diatribas de eso, te las recomiendo. Literalmente es otro mundo y si no explicas nada la gente se desorienta. A mi me pasa lo mismo cada vez que arranco de cero en una historia de fantasía. Meter el trasfondo sin hacer infodumping ni sobrecargar los diálogos con cosas que el protagonista sabe de sobra y que sólo se ponen para darle clases al lector es el objetivo que uno busca, no quieres nada de eso. Pero lograrlo hacer bien es lo duro. Es que estás hablando de países, religiones, costumbres y magia que te acabas de inventar. Hay que explicar lo quieras o no, el lío es la forma en que se hace. Vas bien y esto es un borrador. Ya entiendo mejor lo de los silentes, gracias camarada, nos leemos.

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          1. Si, ya empecé hace unos días a leerme Limyaeel me faltan cientos de su análisis por leer, pero es innegable que lo que dice es cierto y es muy útil. Bueno trataré de no saturar los diálogos de información para que todo se vaya entendiendo mejor en futuros capítulos. Nos leemos camarada.

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  9. Leído primer capítulo, veamos que depara ese duelo entre Ens. Una pregunta: ¿Los Ens andan libremente entre las personas, o se mueven entre las sombras mostrandose a conveniencia a los simples mortales?

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    1. Gracias por leer. Respondiendo a tu pregunta te puedo decir que la inmensa mayoría de los Ens andan libres entre las personas y la minoría trata de mantenerse ocultos, mucho más si son marcados o han violado el código.

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  10. Conteo de palabras: 1506
    Conteo de palabras total: 04 847 / 30 000

    Código de leyes de los Ens

    1 Un Ens no debe emprender acciones hostiles de manera abierta contra los mortales. A menos que el mortal este muy relacionado con los conflictos de los Ens.
    2 Los conflictos de los mortales los resuelven los mortales, los de los Ens los Ens.
    3 Los Ens solo deben iniciarse o ascender bajo órdenes divinas o religiosas y no buscar poder en falsas creencias u objetos.

    Cualquier Ens que viole cualquiera de las 3 leyes será considerado un marcado y será cazado por dioses, Ens y mortales.
    (Fragmentos de la Escritura de la Verdad. Documento anterior a la fundación de las Religiones actuales y de estricto cumplimiento para los Ens)

    Capítulo 1: La Última Prueba del Héroe

    Año 991 Etapa Dorada Ascenso 4

    El cielo se encontraba despejado y el sol se alzaba en su punto medio bañando con sus cálidos rayos de luz a todo el valle. La tierra arenosa, muerta y agrietada se extendía por toda la llanura hasta donde podían alcanzar los ojos. En medio de este paisaje moribundo se alzaba imponentemente una formación rocosa de color rojo apagado. A su lado una magnifica y colosal estatua de un guerrero parecía competir con el cielo dado su tamaño, brindando un poco de su sombra a la superficie de la meseta.

    Allí luego del difícil ascenso por la escalinata que bordeaba el lugar, habían logrado conquistar la cima un joven y un niño. La sombra del coloso los resguardaba permitiéndoles disfrutar del poco viento, ofreciéndoles una vista de los alrededores.

    —Cian crees que algún día el mundo se verá así—Preguntó inocentemente el chico mientras se sentaba en el suelo.
    —El Valle del Silencio de verdad que hace honor a su nombre—Le respondió Cian a su lado con los brazos cruzados—Mi trabajo Yagek es evitar que algo como esto vuelva a ocurrir.

    El niño no le respondió, no era muy hablador. Bueno lo comprendía dado lo que ha pasado. Era un chico de piel morena, ojos azabaches y pelo cobrizo peinado hacia arriba. La ropa que llevaba era una pequeña camiseta, un pantalón y unos pequeños zapatos todo de un color amarillo claro.

    Cian no dijo más. Portaba una armadura ligera hecha de cuero color rojizo, que estaba muy de moda en el Reino del Sol. No era la gran cosa tenía un diseño bastante común al cual le habían sido arrancadas la capa y el casco para avivar una hoguera la noche anterior. Lo que le faltaba a este lugar apartado para ser un desierto era poco. Se acercó hacia una gran cantidad de rocas gigantescas que se encontraban cerca. Coloco ambas manos y abrió una puerta ocre casi imperceptible.

    —Vamos Yagek sígueme

    El chico no tardó en alcanzarlo. Era muy obediente. Ambos comenzaron a caminar por un húmedo pasillo iluminado por ramas de piedra, una tecnología de una era olvidada que ofrecía una pequeña llama eterna azulada, que no calentaba, ni quemaba y se apagaba al caer la noche. A Cian este tipo de cosas siempre le daban curiosidad, pero nadie nunca tenía respuestas a sus dudas del mundo ni les importaba investigarlas, lo cual le frustraba.

    Se oyó el sonido de las puertas volviéndose a cerrar automáticamente. Empezaron a bajar unos escalones y el niño colocó su mano en una pequeña tira de la mochila que cargaba Cian para sujetarse. Era tímido y Cian no quería molestarlo brindándole su mano, en este mundo todos debemos ser fuertes.

    Al bajar las escaleras se toparon con otro pasillo, este más corto por lo que no tardaron de llegar a la luz del final, donde les esperaba una encorvada silueta.

    —¡Alabada Silenuvis! hijo pensé que nunca vendrías—Dijo un pequeño anciano alegremente cuando llegaron.
    —Oh te ves bastante saludable viejo—Cian se acercó y se dieron un abrazo
    —Cuidado muchacho que se me va la salud—El viejo se separó—Veo que ahora mides unos 2 metros y medio… ¿Qué has estado comiendo para ponerte así?
    —Efectos secundarios de Ens—Le contestó Cian haciendo una mueca al ver que casi llegaba al techo de piedra
    —¿Has terminado tu viaje?
    —Sí Demo, ya soy un Ens de pétalo superior.

    El anciano asintió. Y vio a un niño ocultándose detrás de Cian.

    —¿Y este pequeño amigo de dónde salió?
    —Se llama Yagek, es el único superviviente de la aldea Cumbre Norte que fue atacada por el Antiguo hace un quinque—Respondió Cian y el chico se ocultó aún más detrás de él.
    —Ya veo, Cian sabes el código ¿por qué no hiciste lo de siempre y ya?
    —A diferencia de los otros niños, no le puedo pedir que recorra medio mundo en busca de mi grupo a un chico que tiene amnesia
    —Bobadas sabes que su pérdida de recuerdos es temporal, su mente lo protege del trauma que experimentó, puede superarlo solo—Demo hizo una pausa—No me digas que es porque te recuerda…
    —¡Basta! Lo que haga o deje de hacer es mi problema—Dijo Cian el cual hacía tiempo que no se molestaba, su pasado aun lo perseguía.
    —Entiendo…—Dijo el anciano y se quedaron en un silencio incómodo.

    Cian sabía que lo decía por su bien y más ahora que era un Ens y no cualquier Ens sino el Héroe de los Susurros, una leyenda cuyo peso había caído sobre él desde aquel día en el pueblo de Refugio Blanco, en el Reino de Escarcha.

    —Viejo lo siento…—Dijo apenado
    —No tienes por qué disculparte, no eres cualquier Ens después de todo—Demo se dio la vuelta—Vamos sígueme todavía te falta una prueba para que seas el famoso Héroe de los Susurros.

    Se notaba como los años habían caído sobre su espalda. Portaba una larga túnica morada que no dejaba ver casi sus sandalias. Ya debía de tener alrededor de 145 años y a pesar de estar arrugado y haberse quedado completamente calvo sin haber lucido nunca una cana, el tiempo no había podido robarle su mirada con esos ojos de color vino. Esa mirada desafiante con la que había retado a los 9 reinos cuando fue el primero en reconocer al criminal Cian como Héroe de los Susurros, con la que lo habían degradado de la Iglesia Leal cuando quiso entrenarlo y lo mandaron solo a un lugar tan apartado como el Valle del Silencio y con la que desafiaba a la vida en un mundo que nadie quiere salvar porque se acerca el año 1000.

    Si había llegado a ser un Ens de pétalo superior sobreviviendo en un mundo de dioses y de magia al cual se había lanzado de cabeza era gracias a él. Le debía tanto. Pero Cian estaba seguro de que lo iba a sacar de aquí. Ya todos los reyes lo habían reconocido junto a las Iglesias. Solo le faltaba tener todo el poder del Héroe de los Susurros y se llevaría a Demo a vivir con él y su grupo a su mansión en el Reino del Sol.

    Los tres caminaron un buen rato hasta que llegaron a una habitación casi vacía por completo a diferencia de las que habían pasado que estaban repletas de bancos de piedras y candelabros.

    —¿Y que se supone que debemos hacer aquí? —Preguntó Cian al ver un lugar tan espacioso iluminado por ramas de piedra y con una única silla de madera sobre la que descansaba una extraña estatuilla con forma de ciervo.
    —Aquí hijo es donde comenzaremos la última prueba para despertar la última esencia de tu ser—Dijo Demo el cual cogió la figura que reposaba en la silla con sus manos y se sentó.
    —Comprendo—Cian dejó la mochila en una esquina para que no le estorbase en la prueba que desconocía.
    —¿No vas a dejar al chico afuera?

    Ya veo ¿qué hacer con Yagek? Lo miró y vio como él niño parecía no querer separarse de su lado.

    —No veo problema con que se quede a mirar, tal vez lo ayude con su problema de amnesia—Al decir esto a Cian le pareció ver como el chico se calmaba.

    Demo suspiro.

    —Muy bien esta estatuilla con forma de ciervo que tengo en mis manos contiene la esencia del antiguo Amo del Silencio derrotado hace 300 años—Explicó lentamente el anciano sobre su silla— Tu trabajo es derrotar su poder ahora almacenado con tus susurros.

    Cian asintió. No parecía complicado. Aunque nunca se había enfrentado a la esencia de un Ens especializado en el silencio o como lo llamaban popularmente “silente” no vio problema, después de todo su poder era el opuesto. Demo parecía que iba a iniciar la prueba.

    —Solo te pido una cosa héroe—Dijo el anciano captando la atención de Cian—Intenta acabar rápido y trata de no matarnos ni a mí ni al chico.
    —¡¿Espera qué…?!

    Demasiado tarde, ya Demo había quebrado la cabeza de la estatuilla del ciervo, de la cual no tardó en salir disparada una niebla oscura que comenzó a expandirse por toda la habitación. El silencio lo había consumido todo.

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    1. Interesante, nuestro héroe se entrena para vencer al enemigo. Espero leer el otro para ver cómo le va. Pero me quedé esperando a Jade, tu ladrona, esa chica me gustó. ¿Veremos algo de ella pronto? Bueno, ya veremos. Nos leemos camarada.

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      1. Gracias por la lectura. Qué bueno que te haya gustado Jade, es el personaje que más trabajo me está dando desarrollar ya que su historia es bastante compleja. Muy pronto saldrán capítulos que protagonizará ella.

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    1. Je je, ya todas las espadas que tenía me la compraron en Amanecer Oscuro. Gracias por la lectura Nebí. El detalle de los “no” lo pensé bastante para usarlo y a lo mejor lo cambie a futuro, es para resaltar el pensamiento fugaz del personaje, en mayúscula para que atraiga la atención y unidos para que solo cuenten como una palabra y se note así su desesperación.

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  11. Leído el primer capítulo y camina muy bien. Me llevaste de inicio a fin sin perder el hilo y la historia se deja entrever como algo interesante. Hay magia y una sociedad de fondo que me gusta. Buen arranque camarada. El inicio donde en la fecha marcada va a despertar el amo del silencio contra el cual hay que unir a todas las naciones me recordó a La Rueda del Tiempo, pero tu protagonista no se parece en nada a Rand Al’thor y me parece que tú historia va por otros rumbos. Igual creo que has hecho un buen trabajo en esto y voy a estar esperando los otros capítulos.

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    1. Gracias por la lectura camarada, me alegra que te haya gustado. No me he leído todavía la Rueda del Tiempo así que no sé si se va a llegar a parecer, pero trataré de que la historia sea lo más diferente posible a las que he leído hasta ahora.

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      1. Me gusta, excelente hasta el momento, los participantes están poniendo el nanowrimo a mil, tremenda calidad. Es como dice el camarada Volgondring te lleva de principio a fin. Buena suerte y sigue publicando nuevos capítulos, que por lo que se ve va a haber mucha acción

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      2. Ánimo con la escritura que vas bien. De la rueda que te digo, son 14 libros de mil páginas cada uno sobre una historia que es el clásico camino del héroe con sus subtramas. Ojo, es el mejor camino del héroe que te vas a encontrar, o eso dicen, soy un fan de la saga pero con los pies en la tierra, la rueda del tiempo pudo haberse hecho en siete libros y hubiera quedado genial. Es la historia de Rand Al’thor, un jóven campesino que es la reencarnación de Lews Therin Telamon, el hombre Aes Sedai más poderoso que se recuerda, quien en la era de leyenda encerró junto a los cien compañeros (los mejores magos que había) al oscuro Shai tan (Dios mío menté al oscuro, todas mis cosechas se pudrirán😂😂), ese es el gran señor de la oscuridad, dueño del inframundo y creador de criaturas repugnantes como fados y trolocks. El oscuro ha abierto una grieta en su prisión y saldrá de ella pues así está escrito en las profesías, cuando el dragón renacido (Al’thor) unirá al mundo para librar la batalla final (el taimon gaidon) usando la espada que no es una espada (Callandor) y con la ayuda de los mejores hombres y mujeres encauzadores (los ashamanes y las Aes Sedai). A mi me encantó la saga aunque no me he leído los dos libros finales. Igual ya sé lo q pasa, eso me ha frenado. En resumen eso es la rueda, un viaje apasionante con algunos buenos y malos momentos. Si un día te animas la puedes leer. Tal vez te pase como a mí y no te parezca tan larga.

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  12. Conteo de palabras 03 341/30 000
    —————————
    Es hora de poner fin a las falsas leyendas. Nuestra tierra ¨Amanecer Oscuro¨ la última fortaleza de los mortales se enfrenta a algo peor que las guerras, dragones o dioses coléricos, el Amo del Silencio pronto despertará (…) ¡Basta ya de las actuales tenciones políticas y religiosas! Acaso los 9 reinos no debemos de permanecer unidos en estos tiempos. No es suficiente ya con los problemas que nos acarrean los Ens (…) Debemos estar alertas, las tres Religiones han concordado por primera vez en la historia, se acerca el Fin de los Tiempos el temido año 1000 debemos tratar de impedir esta profecía al costo que sea necesario (…) Por eso les ruego a todos los presentes ¡unámonos! Es la única manera de hacer frente a lo que está por venir.

    Fragmentos del planteamiento del Rey Ruten III en la Cumbre de los Reyes, Año 983. Etapa Oscura. Descenso 6. La propuesta fue desestimada y el rey asesinado días después. Principal sospechoso: Cian Mercur.

    Prólogo de la Neutralidad

    Año 984 Etapa Verde Ascenso 3

    La Nieve Eterna caía sobre Refugio Blanco. Tierra rodeada de abundantes bosques de árboles pálidos situada en las cercanías del río Finull. El poblado es considerado por muchos viajeros de dentro y fuera del Reino de Escarcha un lugar acogedor, con buen comercio, clima estable y seguridad inquebrantable. En fin, un buen lugar para vivir.

    Jade lo odiaba. Su estómago rugió.

    «Maldito lugar»

    La chica caminaba por el poblado, vestida con su única ropa: un pantalón harapiento y una camiseta de mangas largas sucia. Sus zapatos, si es que se podían llamar así estaban al borde de no cumplir su propósito y dejarla descalza sobre la nieve. Pero Jade sabía que tenía que ser fuerte como le había dicho su padre, lista como le aconsejaba su madre y rápida como sus hermanos y hermanas. Ahora que estaba sola sus palabras se habían quedado para protegerla.

    —¡Cuaja-Cuaja!

    Se oyó un sonido burlón al lado de ella. Desde un tejado cercano un Vigilante Alado la observaba con sus ojos, dos arrancados y dos brillantes mientras canturreaba. Esa ave tenía un plumaje blanco típico de esta época del año. Su forma era similar a la de un águila que Jade había visto en un libro, pero con una forma más imponente, más astuta. Ella estaba segura de que ese pajarraco se estaba burlando de ella. Que ganas de comérselo le daban. Lamentablemente los Vigilantes Alados eran adorados en el reino y considerados un ave sagrada.

    El estómago de Jade volvió a sonar.

    «Maldito lugar»

    Todas las viviendas que la rodean, así como los muebles y artículos estaban hechos de la madera pálida talada del bosque cercano. Un material que volvía los interiores cálidos y que posee una gran resistencia y durabilidad. Miro con tristeza por la ventana de una casa. Adentro había una familia que se preparaba para almorzar. Ella sabía que tenían prohibido compartir con ella. Jade sacudió la cabeza y siguió su camino.

    «No debí regresar a este sitio»

    No tardo en parar en seco. Se escuchaba el canto del metal al unísono con la marcha de la guardia. La chica se ocultó detrás de unos barriles en un pequeño estrecho entre dos casas. Aparecieron unos caballeros y miembros del ejército real. La mayoría vestidos con brillantes armaduras metálicas de las cuales salían plumas de un blanco puro. Los cascos tenían forma puntiaguda con 4 agujeros donde iban los ojos y una larga pluma en la punta. Eran soldados del mismísimo caudillo de la guerra “Tempestad”. De vez en cuando pasaban esos pequeños grupos que iban o partían de la capital.

    «Debo pedirles ayuda»

    Se detuvo, no era una buena idea. Aunque esas armaduras emplumadas simbolizaban el honor y sacrificio por su pueblo, aun así, era mejor no confiar. Espero un rato y las tropas siguieron de largo. Salió de un salto de su escondrijo. El mundo giro a su alrededor y por poco se cae. Su estómago volvió a protestar. Estaba llegando a su límite.

    Era hora de dejar este lugar. Tal vez en el bosque algunas de las trampas habían capturado algo. Después de todo había empezado la Etapa Verde lo que hacía que hubiera más animales que en la anterior etapa del año.

    Sintiendo un dolor y pena que no eran nada comparados con su hambre se marchó del pueblo. Ya venía siendo hora, sus ganas de venganza hacia Trot le empezaban a parecer un sin sentido. En su actual estado era presa fácil para él. De seguro su familia muerta no quería que malgastara su vida tras ese maldito. Se obligó a realizar una sonrisa falsa, sabía que cuando su hambre estuviera saciada regresaría como veces anteriores, después de todo su vida no tenía sentido, no tenía propósito.

    Algo capto su atención, en las afueras del pueblo había un grupo acampando cerca de los árboles pálidos. La chica se lanzó en la nieve y comenzó a arrastrarse. ¡Al fin alguien a quien robar! Una oportunidad. Pero era raro que desearan acampar en las afueras teniendo un pueblo delante. ¿Tendrían algún Ens entre ellos? La verdad ya no importaba, mejor eso que encontrarse las trampas seguramente vacías en el bosque.

    Tenía que localizar al que estaba de guardia en el grupo. Solo así podría saber cómo infiltrarse sin ser notada. Ya estaba cerca, la Nieve Eterna caía sobre ella mientras se arrastraba y todavía no veía lo que buscaba. Se le acababa el tiempo.

    —¡Cuaja-Cuaja!

    Se escuchó el grito de la maldita ave pasando volando cerca de ella. De verdad que si perdía esta oportunidad por ese bicho le iba a lanzar tal pedrada que la iba dejar tiesa. Le importaba una mierda que fuese el símbolo nacional, se la iba a com…

    El Vigilante Alado aterrizó en la rama de un árbol pálido. Debajo en una rama más gruesa se encontraba un hombre que miraba confundido hacia arriba. Vestía con un denso abrigo blanco apenas visible por la nieve y la blancura de las hojas del bosque. Jade no sabía si había tenido suerte, lo que si vio fue una oportunidad. Rápidamente avanzó hacia el campamento y se desplazó por un punto ciego. Escuchó un poco de la conversación de los hombres mientras avanzaba.

    —Líder todo esto es muy extraño ¿que nos ocultas? —Se oyó a un hombre en tono preocupado y molesto rodeado de las afirmaciones y gruñidos de otros muchos.
    —Sus dudas me parecen irrelevantes acaso no he cumplido todas mis promesas—Le contestó una voz más potente y calmada.
    —Eres demasiado raro, los dioses nos castigaran si seguimos con esto, ¡Mandaran a los putos Ens a por nuestras cabezas!
    —Bobadas, solo obedezcan y no me vengan con religiosidades que todos sabemos que poco les importan.
    —No, ya no te seguiremos vete de aquí, ya no eres el líder ¡Fuera antes de que te rebanemos en rodajas!

    La discusión parecía continuar. Pero el líder seguía intentando calmarlos. A ella poco le importaba el tema. Logró llegar hasta un borde del campamento justo al lado de una carreta tapada con una tela verde encima. Se metió adentro. Al fin la suerte le sonreía. Era la de suministros. Rápidamente encontró en la oscuridad una caja entreabierta con olor a comida. Contenía carne de cerdo ahumada, dura, fría, pero un alimento invaluable para ella. Comenzó a tragar todo lo que pudo sin apenas masticar. Sus bolsillos antes vacíos no tardaron en llenarse. Salió de ese sitio esta vez con el estómago revuelto pero lleno.

    Bien, había logrado sobrevivir.

    Jade comenzó a elevarse del suelo. Unos gruesos brazos la levantaron y empujaron contra la carreta. No tardó en reconocer la cara grasienta y maloliente de ese desgraciado de Trot. La había capturado.

    —Pero mira a quien tenemos aquí—Dijo con una ancha sonrisa—La última rata de Refugio Blanco.
    —¡Maldito mil veces maldito!
    —Bah, los niños de hoy en día no deberían decir esas cosas ¿No creen chicos? —Preguntó a los soldados que le rodeaban, hombres que no portaban plumas en sus armaduras al igual que tampoco llevaban honor—Yo creo que merece ser castigada.
    —¡Basta! ¿Quiénes son ustedes? —La poderosa voz de antes se escuchó nuevamente.
    —Somos los guardias de Refugio Blanco ¿Quiénes son ustedes? —Gritó Trot lanzándola hacia un guardia cercano que no tardo en amárrale bruscamente las manos.
    —Solo somos viajeros, no pensamos detenernos en su pueblo vamos con prisa

    Jade logro fijar su vista en el hombre. Extranjero. Lo reconoció de inmediato al ver los densos abrigos de piel que llevaba a juego con unas robustas botas. Su cabello negro parecía llevar tiempo sin cortar, pero no tapaba sus ojos azules desafiantes respaldados por una nariz afilada y una sonrisa enigmática. Era bastante apuesto en contraparte con Trot que lo miraba desde abajo con su figura de regordete vestido con una casaca blanca que apenas le quedaba, con un rostro de pómulos y nariz anchos, labios gruesos y ojos dorados rodeados a ambos lados por su corto cabello rubio.

    —Ahórrate los cuentos de cantamundos, vinimos a advertirle a tu gente que no se acerquen al pueblo–—Explicó Trot en tono amenazante.
    —Está bien intentaré decírselo a los chicos, si es que quieren escuchar a su exlíder—Le contestó el extranjero mirando hacia atrás y viendo como sus hombres no lo habían acompañado a ver a la guardia.
    —Muy bien nos vamos, recuerda que estas advertido
    —Espera un momento—Dijo el extranjero mientras señalaba a Jade—Esa chica que se llevan pertenece a mi grupo.
    —No me digas—Respondió Trot con una sonrisa burlona mientras se sacaba un papel arrugado del bolsillo y se lo estiraba para enseñárselo, era un cartel de Se busca—No tientes tu suerte, forastero y mira bien, pelo rizado rojizo, ojos verdes, pequeña y mugrosa tal y como en el papel, ella es la última de una banda de ladrones que merodeaba en las cercanías y debe ser juzgada o acaso quieres mezclarte con ella.

    Todos los guardias llevaron las manos al mango de sus espadas largas.

    —No tranquilo igual ya no soy jefe ni nada puedes irte—Dijo con una sonrisa
    —Sabia decisión, procura no mostrar tu estúpida cara por el pueblo que no te quiero allí me da igual que te hayan abandonado

    Y con un gesto se marcharon del campamento sellando la suerte de Jade. Aunque bueno no es que tuviera la esperanza de que aquel sujeto la ayudara. Trot tenía mucha influencia en las milicias y varios pueblos de la zona, ningún ciudadano ni guardia podía hacerle frente. Las esperanzas de que pudiera vengarse del ahora le parecían niñerías.

    «Espera no nos estamos desviando»

    Estaba en lo cierto. Trot se detuvo un momento.

    —Ustedes dos acompáñenme con la chica, el resto regrese al pueblo y esperen nuevas órdenes.
    Jade vio como la arrastraban tirando de la soga amarrada a sus brazos, sin importar si la lastimaban. Iban camino a la choza abandonada de un leñador que murió la pasada etapa.

    «¡NONONONONONONONONONONONONONONONONONONONONO!»

    Esto no puede estar pasando.

    —¡Suéltenme malditos, basta ya, malditos hijos de…! —No pudo terminar de hablar el puño de un guardia se estampó contra su rostro derribándola en la nieve, pero aun así continuaron avanzando llevándola a rastras.

    Jade empezó a ver el mundo con colores que no debería y sintió como le sangraba la nariz y los labios. Tampoco escuchaba con claridad. Ya para cuando regreso en si los guardias la lanzaron para adentro de la cabaña golpeándose aún más con los muebles de adentro.

    —Esperen afuera y que nadie pase—Ordenó Trot quedándose solamente ellos dos solos adentro de la casa.
    Jade se arrastró. Quiso parecer fuerte, pero le era imposible. Dada la repugnante sonrisa de Trot ya debía haber visto en sus ojos el pánico.
    —No te pongas así no es como si fuera a violar a un saco de huesos como tú, te falta tanto el desarrollo como el porte de tus hermanas, a esas sí que valió la pena.
    —¡Te voy a matar asesino! — Gritó Jade con odio y sintió como sus mejillas se humedecían.
    —Me quieres hacer ver como un villano, tú y tu gente se la pasaron años robándole a los ricos, a los pobres, a todos. No les importaba nada ni nadie y aun así creían que el reino no tomaría acciones—Le dijo agresivamente mientras le propiciaba una patada en el vientre que la dejó pegada al suelo—Ahora la economía está prosperando, el pueblo se siente más seguro no como antes con los de tu calaña merodeando, eres la última ladrona de toda la zona y pronto no habrá ninguna.

    Trot desenvaino su espada. La hoja de acero brillaba peligrosamente.

    —¿Por qué… no me encierras como al resto? —pregunto Jade desde el piso de madera.
    —Por mucho que me gustara torturarte hasta la muerte, el otro día recibí una visión divina cuando fui a la iglesia. Si mato a todos los criminales de los alrededores que aparecen en cierto listado me volveré un Ens y adivina eres la última que me falta—Dijo riéndose a carcajadas—Nunca pensé que adquirir el poder de los dioses sería tan sencillo, así que se buena chica y muere por mí.

    Estaba tan acabada como el gremio de ladrones del Reino de Escarcha. Le habían arrebatado a su familia, la habían dejado miserable matándola de hambre y ahora los dioses la volvían una especie de sacrificio para que alguien como Trot se volviera un Ens. Odiaba este maldito mundo si le fuera posible lo destruiría, pero su vida estaba al llegar a su fin. La hoja ejecutora se alzó ante ella, cerró los ojos y suspiro.

    Todo estalló en pedazos. Bueno no tanto, pero cuando los restos de la puerta de la cabaña chocaron contra la pared del fondo, en un mar de astillas, vísceras y sangre a Jade le pareció que todo estaba por ser destruido. Trot palideció mientras miraba una figura imponente en la puerta. Era el exlíder del campamento.

    —¡Tú! ¿qué haces aquí? ¿qué le has hecho a mis hombres? —Reclamó Trot mientras los restos y vísceras rodaban a su alrededor, ahí tenía la respuesta a su última pregunta —No sabes quién soy yo, esto no se va a quedar así, aun puedo perdonarte si te marchas.

    El hombre no pronunció palabra alguna, solo se escuchó un latido innatural a su lado. En su mano derecha el aire tomo forma y se solidificó, apareciendo una magnifica espada como nunca se había visto. Era de aproximadamente metro y medio… espera no su tamaño parcia alterarse mientras la movía y de su ahuecada hoja como si de un instrumento musical se tratase salía una dulce melodía.

    Ese sonido la destruía por dentro. Jade sintió unas náuseas y comenzó a vomitar, intentó mirar que estaba pasando y vio como Trot caía de rodillas ante el sonido soltando su arma y llorando dolorosamente. De un rápido y limpio golpe que no alcanzó a ver Jade sintió una calidez en su rostro, era sangre. La cabeza de Trot se separó de su cuerpo el cual no tardó en estallar en pedazos tiñéndola de rojo.

    El hombre con sus vestimentas impecables y sin una mancha se acercó a ella.

    —Por favor no me hagas daño—Suplicó Jade mientras se arrastraba en vómito, sangre y trozos de carne.
    —Tranquila niña no vine para matarte—Le contestó, su voz sonaba cálida y la espada desapareció en el aire, se arrodillo a su lado sin importarle mancharse sus ropas— Mi nombre es Cian Mercur ¿cómo te llamas pequeña?
    —Ja…de…Jade señor
    —Si tu amigo no me hubiese indicado no hubiese llegado a tiempo, que bueno que te encuentres bien.

    «Amigo, ¿qué amigo?»

    Entro volando en ese instante el Vigilante Alado colocándose en el hombro de Cian el cual le dirigió una sonrisa y quiso acariciarle el plumaje. Pero al ave no pareció gustarle y se fue volando hasta la cabeza de Trot la cual picoteo hasta arrancarle un ojo y engullirlo entero. A Jade se le regresaron las náuseas.

    —Como sea, afuera te deje un pequeño bolso, espero que encuentres ropa de tu tamaño
    —Gracias
    —Espera chica yo no dije que salvarte fuera gratis

    Ya a Jade le parecía demasiado bueno para ser verdad. Claro que no la habían salvado de a gratis. Los héroes no existen, ya no.

    —Y que desea un Ens tan poderoso de una mortal agradecida como yo
    Cian estalló en carcajadas.
    —No niña no soy un Ens, tal vez en un futuro—Se detuvo y la miró—Ah lo dices por la Hoja Cantora, no eso es una de las 9 armas divinas, pero, aunque la use sigo siendo un humano cualquiera.
    A Jade no le hizo tanta gracia. Qué clase de mortal hay que ser para controlar semejante poder.
    —Bien ¿qué quieres que haga?
    —Eras del gremio de ladrones así que lo que necesito es un robo.
    —Y ¿qué quieres que robe? —Pregunto Jade enarcando una ceja.
    —La bolsa con las donaciones en efectivo para la Iglesia Neutral de esta región. Cuya Sede se encuentra en el templo de Refugio Blanco.
    —No parece complicado ¿cómo lo dividiremos? que, aunque me hayas salvado la vida me imagino que me darás una parte como pago ya que así funcionan los tratos
    —Descuida conozco el protocolo y en cuanto al robo te puedes quedar con todo el dinero–Dijo con una sonrisa
    —Pero eso no tiene sentido…ya entiendo…ya has hecho esto antes y por eso tus hombres desconfiaban de ti—Dedujo Jade al atar los cabos
    —Eres una pequeña muy astuta, no te preocupes por ellos ya están muertos ya me imaginaba que hacer tratos con bandidos no es lo mío, como sea te dejo el trabajo—Cian comenzó a levantarse y le lanzó un extraño sobre que Jade manchó de rojo con sus manos—Es una invitación para que te unas a mi familia, necesitamos a personas con tus habilidades.
    —Pero ni siquiera sabes si soy leal o soy buena robando—Respondió sorprendida.
    —En serio, eres la última de los tuyos y eres inteligente sé que tomaras la mejor decisión—Dijo mientras se acercaba a la puerta—Ya que eres de por aquí me puedes aclarar una duda ¿Por qué la nieve que nunca para de caer, no termina sepultándolo todo? Eso es raro
    —¿Eso es importante? —Dijo ella y Cian le devolvió una sonrisa
    —Tienes razón a nadie debería importarle, de momento—Se comenzó a alejar—Hasta la próxima si es que sobrevivo al sistema de torturas de Refugio Blanco, necesito comprobar que tan efectivo es.
    Y así despareció entre los arboles pálidos.
    —Cian tu eres más raro que la Nieve Eterna—Dijo Jade y sonrió por primera vez en mucho tiempo.

    Las donaciones de la Iglesia desparecieron al otro día. Para Jade no fue muy difícil ya que todos estaban concentrados en un supuesto asesino que se entregó para que lo torturaran. Jade se marchaba del Reino de Escarcha a climas más cálidos. El sonido de una bolsa recién robada repleta de monedas la reconfortaban. Solo había un problema ella no era capaz de usar ese dinero ya que superaba su clase social. Tal vez con cierto amigo de su padre a cambio de la mitad de la bolsa pudiera mejorar su estatus social para poder usar esas estrellas de plata. El Vigilante Alado la seguía desde el cielo. Ella nunca había tenido una mascota, pero bueno siempre hay una primera vez. Ni siquiera sabía por que la había escogido.

    El sobre que le dio Cian tenía una dirección de tierras lejanas donde se encontraba parte de su grupo. Su nueva familia. Un nuevo comienzo.

    Días más tardes una noticia se extendió por todo el mundo el criminal más buscado de los 9 reinos Cian Mercur adquirió los poderes de un Ens en las mazmorras de Refugio Blanco asesinando a todos los guardias del lugar horas después de que se cometiera un robo en el templo local. Todo parecía estar relacionado a unos extraños ataques a Iglesias Neutrales del Reino de Escarcha ocurridos en 6 ocasiones anteriores.

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    1. Hola, Gren Maun! Leído el primer capítulo. Cómo lectora tengo un señalamiento y una sugerencia (spoiler alert!): en la escena en que Jade se esconde de unos guardias,se describe que estos llevan armaduras de metal. Si están en un clima tan frío, no deberían llevar armaduras de otro material? A ver, quizás tengas una explicación más adelante en la historia. Es fantasía, pero me dejaste pensando… Y cómo sugerencia, quizás para reforzar por qué Cian le ofrece de golpe trabajo a Jade, confiando en sus habilidades, creo que vendría bien mostrarla antes haciendo uso de su excepcional talento para el robo más allá de colarse en la carreta, o al menos saber indirectamente de algo que ella hizo y en lo cual se muestre que es endemoniadamente buena como para que Cian la necesite o le ofrezca tan confiado el trabajo -repito, no sé si lo abordas más adelante… Por cierto espero ver más de Jade, ojalá no le pase como a mí Renea 🥲… Un saludo!

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      1. Bueno, Gamora, en los climas fríos se usaban ropas y telas bajo la armadura para evitar eso mismo, la congelación, así que si pueden ser armaduras de metal, en cuanto a Jade era la última ladrona del clan, seguramente muy conocido y por eso Cían le invitó a que se uniera a los suyos. Claro eso es lo que pienso, lo cierto es que ni me pasó por la mente nada de lo que comentas, estoy superficial

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        1. Sí, bajo las armaduras van gambesones y otras piezas para proteger del frío, pero con lo de ‘Nieve Eterna’ y ‘Reino de la Escarcha’ me imagino un lugar en plan taigá de Siberia, algo así, y en esas temperaturas tan bajas continuamente hay que considerar también que el metal puede llegar a quebrarse con facilidad, haciéndolo entonces más débil de los que se supone. Solo son consideraciones, quizás me extrapolé demasiado.

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      2. Bueno la verdad que se me fue ese error con las armaduras metálicas y el clima frio, deben ser súper incomodas e imprácticas. Cuando rescriba el prólogo veré que hago con las armaduras, mientras me voy documentando un poco sobre el diseño de las mismas. En cuanto a la decisión de Cian con Jade es como dice Sauron era la última de los suyos, una superviviente y una ladrona de unos de los mejores gremios que ha existido tal y como fue Cian en su época. Pero estoy totalmente de acuerdo contigo Gamora en que se puede mejorar esa parte en la que Cian confía en las habilidades de Jade para que tenga más sentido el argumento en dicho momento. Bueno muchas gracias por la lectura camarada, tu opinión me ha servido de mucho. En cuanto a Jade si terminó el libro la vas a ver hasta el final muchas veces protagonizando capítulos, pero no te garantizo su seguridad como la de ningún personaje. En cuanto a Renea…todavía me duele lo que le pasó, me encariñe con el personaje.

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        1. Hola, Gren! Eso es una de las cosas más super del género: en fantasía, las opciones pueden ser miles! Puedes hacer algo diferente, raro, original con las armaduras y el clima (más allá de resolverlo con simplemente un toque magia, ojo). Happy to help!

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    2. Leída la primera parte de tu historia, camarada. Y, por ahora, el principal problema que le veo y que deberías trabajar es la ortografía y el uso de las comas, que con eso, la lectura mejora mucho. Luego, una que otra cosita respecto al punto de vista, pero esas se van puliendo con el tiempo.

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      1. Gracias por la lectura camarada. Si el borrador completo va a necesitar que le haga una revisión ortográfica y de los signos de puntuación, además de que tengo que estudiar dichos temas para poder mejorar.

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        1. Tranquilo, eso es con calma.
          Ahora, un par de consejos adicionales que se me pasaron ayer:
          -Debido a que estás narrando el libro en tercera persona, los pensamientos de la protagonista deben ir en cursiva, para resaltar del texto.
          – después de los — a mitad de diálogo, se comienza con letra minúscula.

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