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Anexos de Los 43 días de Kangayowa, por Yoss

Dramatis personae

1-Ambarth: caballo alazán, montura del vizconde Arboth de Kalagraz. Sobrevive al sitio, se desconoce su fin.

2-Barboth: sargento de los Perros de Mar, subjefe de la escolta personal de la generala Ygrelth en el sitio de Kangayowa. Nombrado capitán de navío, desaparece en el océano Mayabún, siendo parte de la flota exploradora del almirante Lomborth.

3-Bhuir-Xhoran: orfebre real de Khork, de origen xastano.

4-B´kamba: joven capitán catafracto, segundo de N´bule y amante suyo, de muy hermosas facciones. No hablaba muy bien el khork. Muere en la escalada de Kangayowa, a manos del gigante Oyoga, en el adarve.

5-Bozt: caballo tordo del barón Tarbelth de Termokh.

6-Bulith: marqués de Harmalk. Embajador plenipotenciario enviado a Tumbria por el rey Korgalth II, que contrata arcabuceros e ingenieros de dicha nación, para enfrentar al ejército yowa. Es un hombre de edad, alto, seco y serio. Antiguo soldado de Korgalth I El Hermoso y preceptor de su hijo. Nombrado príncipe por el rey, dirige la desastrosa invasión conjunta khork-tumbriana-gadea, a Yowa, y regresa con sus pocos sobrevivientes. Muere a los 87 años de edad, rico, tras heredar a su amigo Horth de Julgraz, y cortejando sin éxito a la duquesa Ygrelth de Kangayowa.

7-Crumth: corcel de Roburth de Grelth, un palomino. Su amo lo revienta a la carrera, regresando de Graghork a Kangayowa.

8-Darbún: francotirador, sargento tumbriano. Muere en la montaña, congelado; su colega Gorfán baja a la meseta llevando únicamente su cabeza.

9-Diaskolios: capitán pirata zumtar que conduce al kan Ikeda y a sus cuarenta hombres a Grakhork. Su barco es el “Helefor”. El almirante Lomborth lo captura y ahorca, antes de desaparecer en el océano Mayabún.

10-Doniwa: joven pastor yowa que, junto a su amigo Tatao, descubre el desembarco del gran ejército mercenario que envía Korgalth II para atacar Kangayowa por la retaguardia, bajo el mando del príncipe Bulith de Harmalk y el marqués Horth de Julgraz. Enviado a Kangayowa, junto con su amigo Tatao, en calidad de emisario del Tarawa, con el mensaje para el gorakan Yarawo de que abandone la fortaleza y ciegue el túnel, da media vuelta al descubrir que ya está hecho.

11-Famorth: médico que se encarga de la salud del rey Korgalth II mientras su doctor de siempre, el viejo Motkath, cubre el sitio de Kangayowa. Cree, sobre todo, en las cualidades sanadoras de la dieta adecuada.

12-Farath de Kangayowa: hija de Nergath, duque de Kangayowa, nieta de Ilkandra y Jorklith. Madre del narrador.

13-Fergán: mayor, jefe del regimiento de arcabuceros mercenarios. Bajo y robusto, pero extremadamente fuerte, hasta para ser un tumbriano. Usa su franja de pelo pelirrojo en una larga cola. Montañista y gran amigo de Sabarupal, comandante de los piqueros gadeos. Habla khork con sintaxis extraña y salpicándolo de palabras tumbrianas. Mata a Oyoga, en combate singular, con varios disparos de rifle, pistola y la espada La Barra. Organiza la avalancha que sepulta la fortaleza. Se queda en Khork, como asesor de la nueva guardia real, con el rango de coronel, se casa con una mujer de la baja nobleza y tiene hijos.

14-Fujozz: el implacable dios de dos caras de los tumbrianos, que controla el verano y el invierno.

15-G´Ambeta: presidente abulano en el momento de los hechos, de edad provecta.

16-Gamelón: cruel dios abulano con cabeza y brazos de mantis religiosa.

17-Gargluth: mestizo de yowa y khork, afilador de espadas y vendedor de cuchillos. Hermano de Urwako. Aparente informador del Ejército Libertador, en secreto es agente de los sitiados Intenta matar a la generala Ygrelth y muere, al clavarle un barong el comandante de piqueros gadeos, Sabarupal. Pero sólo tras matar al obolobo Juborth, asistente de la generala, y herir al vizconde Arboth de Kalagraz, en el rostro.

18-Garnamulen: Joven y apuesto teniente de piqueros gadeos, amante de la generala Ygrelth en su lejana juventud. Valeroso y sediento de gloria, murió en combate, alcanzado por una flecha gigante de balista tumbriana, en 4287 dfw, año de la serpiente y la sangre.

19-Gorfán: francotirador, sargento tumbriano. Ascendido a teniente cuando mata al kaikodo Uyasewa con un disparo de su rifle, desde la montaña, al amanecer del segundo día de la escalada… la bala rebotó contra el peto del gorakan Yarawo, su verdadero objetivo. Perdió varias falanges por congelación, de tanto aguardar en la helada montaña.

20-Gumgarth: también llamada Partecráneos, por la terrible maza de madera que usa. Líder de los guerrilleros ryukeshas y jefa de la guardia personal de la generala Ygrelth en el sitio de Kangayowa. Mujer muy grande y obesa, casi tan velluda como un hombre, de rostro algo deforme. Tiene los dientes afilados como colmillos. Cambiapieles que puede transformarse en osa pescadora. Con este aspecto combate contra Oyoga, tras luchar con él como humana, cantando, por dos horas… pero es vencida por el gigante yowa, que le quiebra la espina, devolviéndole su forma humana en la muerte. Los ryukeshas le erigen una estatua en sus dos aspectos, humano y animal, en un pedestal sin inscripciones, pues aseguran que no olvidarán nunca su nombre.

21-Hankawa: jefe yowa de la barbacana. No es un kan. Herido en un brazo por una bala de rifle tumbriano, muere luego, a manos de los ryukeshas, al ser enviado solo a ellos por el gorakan, como castigo por ser uno de los pocos sobrevivientes del desastre.

22-Hidoshi: guerrero yowa. Al ser sorprendido robando comida, pidió redimirse conduciendo la salida de doscientos jinetes, para capturar las supuestas bombardas khorks, durante los combates de la escalada. Muere en la explosión de los tubos de madera llenos de pólvora, o luego, a manos de Partecráneos y sus ryukeshas; nunca se sabrá.

23-Horth: duque de Julgraz. Embajador plenipotenciario de Korgalth II en Arbastalaba, capital de Gadea. Un anciano bajo, regordete y alegre. Fue preceptor del rey. Contrata un regimiento de piqueros gadeos. Subjefe del ejército mercenario que intenta atacar el paso de Kangayowa por la retaguardia, tras desembarcar en Shonto-gawaz. Muere decapitado por un jinete nómada, en el combate conocido como la masacre del Cielo de Hierba, durante la frustrada invasión a Yowa. deja todo su dinero a su amigo Bulith de Harmalk.

24-Ikeda: kan yowa enviado ante Korgalth II como embajador, para negociar una nueva paz a cambio de cierta cantidad de oro. Nunca regresa al Cielo de Hierba. Se hace amigo de Ygrelth de Kangayowa, y es asistente habitual a las cacerías a caballo que la duquesa convoca.

25-Ilkandra: jefa de los mineros leprosos, o reina de la Gente de la Oscuridad de Khork. Fue muy hermosa y casquivana; consumida por la enfermedad, su voz sigue siendo agradable de escuchar. Amiga de Ygrelth. Dirige todos los trabajos minería y zapa, en el asedio de Kangayowa. Terminado el sitio, se casa con el artillero Jorklith; Ygrelth es la madrina de la boda. Tienen dos hijos, ninguno leproso. El mayor, Nergath, hereda el tardir roto de la duquesa y se vuelve su sucesor. Ella muere a los 61 años.

26-Jingoshu: pequeño hijo de Kowiya y Nagenji. Su padre regresa a Yowa por ambos.

27-Jorklith: capitán khork de artillería, experto marino que estudió el uso de dicha arma con sus indiscutibles maestros, los tumbrianos. Media sangre de segunda generación, de pequeño estuvo con su padre en Kangayowa. Su madre fue una pescadera de Grakhork. Jefe del contingente de cañones del Ejército Libertador, y en el sitio. Tras renunciar a la vida militar, se casa con Ilkandra y tienen dos hijos, ninguno leproso. El mayor, Nergath, hereda el tardir roto de la generala, que fuera madrina de boda de sus padres, y luego su título ducal. Él muere a los 63 años.

28-Joyán: hijo del sombrero de hierro Narayán: armero e inventor tumbriano. En 4358, año del ciervo y la piedra, desarrolló el primer cartucho integral, y el primer rifle de repetición.

29-J´naza: esposa de N´bule, en Abula. Madre de su hijo y sus tres niñas. Nunca vuelve a ver a su esposo, tras el sitio de Kangayowa.

30-Juborth: uno de los asistentes de la generala Ygrelth: no es un guerrero, sino un burócrata, y muy joven. Nacido en Obolobo, con el nombre de Amaaliba. Nunca viste armadura, pero lleva dos hojas ocultas en sus mangas. Asesino entrenado como guardaespaldas. Muere apuñalado, salvando a la generala del atentado de Gargluth, un mestizo y doble agente de los yowas.

31-Kalagraz, vizconde de: Arboth, joven aristócrata, amigo personal del rey Korgalth II y designado por este su representante personal en el sitio de Kangayowa. Hermoso, gallardo, usa el pelo rizado y suelto al estilo extranjero, aunque no llega a teñírselo como las damas de la corte real. Audaz amante y gran duelista y espadachín, dueño de la temida espada Matamiedos, más conocida como Matamaridos, por sus envidiosos detractores. Pese a ser novato en el campo de batalla, salva a su rey en una escaramuza, combatiendo él solo contra 10 jinetes yowas y dando muerte a varios, sin recibir más que leves heridas. Se ganó así el apodo de Matayowas. Su armadura es plateada, muy vistosa, con yelmo en forma de cabeza de dragón y una pluma de gallo espejo como penacho. Usaba escarpes puntiagudos que casi le cuestan la vida en la escaramuza en la que salvó la del rey, así que luego los cambia por otros de garra de oso, más apropiados para combatir a pie. Es herido en la escalada, y luego sufre un tajo que le desfigura el rostro, a manos del informador Gargluth, cuando el media sangre y doble agente de los yowas intentaba matar a la generala Ygrelth. Nombrado conde por el rey, se casa con la baronesa Yaralth cuando el monarca la repudia, y tienen cuatro hijos, aunque a la vez es amante de la peluquera y prostituta Lyrdia. Comandante de la guardia real, a la que reforma, contratando como asesores para su infantería a Fergán y Sabarupal. Muere a los 59 años, por fallo cardíaco.

32-Korgalth I: apodado El Hermoso o el Mago del Tablero, por su gallardía y destreza en el juego del ychort. Gran jinete y hermoso varón, padre de Korgalth II. Murió a los 79 años.

33-Korgalth II: apodado El Salvador. Rey khork, coronado en 4321, año del guepardo y la gelatina, con sólo 26 años al momento de comenzar la historia. Bajito, regordete y sin barbilla, con calvicie incipiente, jugaba al ychort y se creía un gran guerrero. Contrata catafractos mercenarios para frenar la invasión yowa, se une a la caballería pesada abulana persiguiendo a sus hordas, y en una escaramuza cae de su caballo castrado, sufriendo fracturas múltiples. Usa una vistosa armadura, esmaltada de blanco y con ribetes dorados, con un yelmo de catafracto con máscara dorada, penacho de plumas de gallo espejo, y una alta cimera con una morsa, su animal heráldico ¡peligroso por igual en mar y tierra! En una persecución, cae de su caballo y se fractura ambas piernas y un brazo. De Kalagraz, luchando heroicamente, salva su vida de diez yowas que tratan de rematarlo. Furioso y herido, antes de retirarse a su capital con su amante y su guardia real, el soberano ordena matar a su corcel Yolthrig y conquistar Kangayowa antes del final del otoño… fecha para la que sólo faltan 43 días. Desde Grakhork, sigue haciendo maniobras diplomáticas para atacar Yowa con un desembarco en sus playas. Se casa con la princesa tumbriana Turagán, tras repudiar a la baronesa Yaralth como amante. Tiene un solo hijo; Korgalth III. Muere de gota, a los 49 años, totalmente calvo y muy obeso.

34-Korgalth III: hijo de Korgalth II y la princesa tumbriana Turagán. Más alto y hermoso que su padre, debe pagar sus deudas de guerra.

35-Korgalth IV: hijo del monarca anterior y una princesa xastana.

36-Kowiya: jefe de la artillería de Kangayowa. Tras la muerte de Uyasewa, se vuelve el hombre de confianza del gorakan Yarawo, que lo nombra kaikodo de la fortaleza, poco antes de la avalancha. Renuncia al título y regresa al Cielo de Hierba, tras el final del asedio, para conocer a su hijo, gracias a la generosidad de la duquesa Ygrelth.

37-Kurgaleth IV: abuelo del rey Korgalth II, que tendió la red de anchas carreteras asfaltadas que comunica las tierras del interior de Khork con la costa, sobre todo la capital.

38-Lomborth: comodoro, jefe de los Perros de Mar en la campaña contra los nómadas y el posterior asedio de Kangayowa. Muy callado, sabe que la tierra no es su elemento. Se afeita la cabeza, tal vez porque está perdiendo el pelo. Nombrado almirante, desaparece en el océano Mayabún, tras capturar al “Helefor” y ahorcar a su capitán, el pirata zumtaro Diaskolios. Tenía 57 años.

39-Lyrdia: joven peluquera-prostituta a las órdenes de Yerdirath la gadea. Lleva el pelo con corte asimétrico, rizado y teñido de verde. Tiñe el pelo del capitán Walith y casi se hace amante suya. Pero regresa a Grakhork con el vizconde de Kalagraz, tras atenderlo como enfermera, por su herida en el rostro. Será su concubina hasta su muerte, pese a que el noble se casa con la baronesa Yaralth y tienen cuatro hijos.

40-Margulén: ingeniera tumbriana, que propuso usar ratones como “caballos a escala reducida”, para mayor realismo, en el modelo de asalto a las murallas de Kangayowa con las máquinas de su colega Narayán. Se casa con Narayán y fundan una fábrica de armas, en la que Jorgán, el hijo de ambos, crea el primer cartucho integral y el primer rifle de repetición, años después.

41-M´jumba: impredecible dios abulano, con rostro de hombre y cuerpo de cocodrilo.

42-Motkath: anciano médico khork, facultativo del rey, que lo escayola tras las fracturas sufridas en su caída. Calvo, pero de larga barba blanca. Luego, jefe del hospital de sangre del Ejército Libertador, en el sitio de Kangayowa. Atiende a N´bule y de Kalagraz de sus heridas. Muere el día después de cumplir los 99 años, dos antes que su rey.

43-Nagenji: esposa de Kowiya, el jefe artillero de Kangayowa. Él regresa al Cielo de Hierba para reunírsele y conocer a su hijo Jingoshu, nacido cuando estaba en la fortaleza.

44-Narayán: experto ingeniero tumbriano. Suya fue la idea de los puentes extensibles o plegables con apoyos flotantes. Se casa con su colega Margulén y fundan una fábrica de armas, en la que Jorgán, el hijo de ambos, crea el primer cartucho integral y el primer rifle de repetición, años después.

45-N´bule: coronel abulano, líder de los mercenarios catafractos al servicio de Korgalth II. Viene de varios años luchando en Pondiria. Uno de los dirigentes del asedio de Kangayowa. Tuerto del ojo derecho. Usa una gran pistola de dos cañones. Le regala el rey el gran caballo castrado Yolthrig, que luego usará la general Ygrelth como montura personal. Casado, con cuatro hijos; tres varones y una hembra, pero es amante del capitán B´kamba. Herido en la pierna por una flecha gigante de balista, durante la toma de la barbacana. Lo atiende el doctor Motkath. Lucha con Oyoga, que mató a B´kamba, y es herido nuevamente, pero el gigante sólo le mata a su caballo. Muere en 4326, año del oso pescador y el agua, tras días de agonía, del lanzazo en el vientre recibido en una escaramuza en la frontera entre Pondiria y Obolobo. Tenía 55 años. Envía su espada a su amigo Arboth de Kalagraz, al que nunca vuelve a ver.

46-Nergath de Kangayowa: hijo mayor de Ilkandra y Jorklith. La duquesa Ygrelth le regaló su tardir roto y lo nombró su heredero. Padre de Farath y abuelo del narrador.

47-Nungorth: arcipreste del palacio real de Graghork. Moralista, de digno aspecto, alto y con abundante cabello canoso.

48-Oyoga: gigantesco guerrero yowa, tan alto que a pie su cabeza supera la de un hombre montado, y tan pesado que ningún caballo puede resistirlo. Es considerado un guerrero bendecido por Shonto. Combate con una alabarda gigante y acude al sitio de Kangayowa reclamado por los shamanes. Shakowa y sus herreros le forjan una armadura de más de 200 libras de peso, con un casco adornado con seis cuernos de buey, tres de cada lado, que pronto se convierten en cuatro. Nombrado Martillo de Shonto por su hazaña de contener él solo a decenas de enemigos, en el puente levadizo. Tras eliminar a Partecráneos y a Tarbelth en un mismo día, y matar al caballo de N´bule en combate singular dos jornadas después, es muerto por el tumbriano Fergán, con cuatro rifles, un par de pistolas de doble cañón y La Barra, espada que fuera del comandante Tarbelth. La pica en la que alzan su gran cadáver los ryukeshas es la más alta que haya merecido jamás yowa alguno. Luego le construyen una enorme escultura, amaño natural, cerca de las de Gumgarth Partecráneos y la duquesa Ygrelth.

49-Roburth de Grelth: joven caballero, de pequeña estatura y muy ligero, al que la generala Ygrelth manda a Grakhork a informar al rey que el asedio de Kangayowa continúa, tras el fracaso de la escalada, el día 31. Dueño de Grumth, un magnífico caballo palomino. Regresa con el aviso de la apertura del segundo frente: el desembarco en Shonto-gawaz, dos días después, de fuerzas conjuntas gadeas y tumbrianas, al mando del príncipe Bulith de Harmalk, para atacar la fortaleza por la retaguardia, a través del paso. Ygrelth primero lo nombra su mensajero personal y luego lo toma como edecán, a la muerte del obolobo Juborth. Lleva al rey el mensaje de la avalancha en Kangayowa, y el monarca, agradecido, lo nombra barón. El conde Arboth de Kalagraz, nuevo comandante de la guardia real, lo toma como su segundo al mando, con el rango de capitán.

50-Sabarupal: comandante de los piqueros gadeos, viejo amigo de Fergán, de los arcabuceros tumbrianos. Oriundo de Zumtar, su nombre de nacimiento era Kostalides. Su khork es perfecto, apenas con un leve acento. Nunca se quita su barbuta, en la que usa enrollado el turbante blanco, también. Alguna gente dice que la lleva atornillada al cráneo; le falta un pedazo de hueso, de una vieja herida sufrida en batalla, en Xasta, cuando un disparo en la cabeza casi lo mata: desde entonces es también tartamudo. Es herido en la escalada de Kangayowa, en el brazo derecho. Pero mata a Gargluth, el que intentaba asesinar a Ygrelth, lanzándole un barong con la mano izquierda, que no llevaba en cabestrillo. Se queda en Khork, como asesor de la nueva guardia real y el rango de coronel, y llega a casarse con una mujer de la baja nobleza local.

51-Sarbaltalal: brujo gadeo, capaz de desviar el sonido. Marchó con la artillería khork desde la capital hasta Kangayowa, donde contribuyó de forma decisiva a despistar a los shamanes geomantes yowas sobre la ubicación de la mina que hundió el muro trasero de la barbacana. También ayudó a ocultar la excavación de la cámara de fuego bajo el glacis, frente a los muros de la fortaleza. Su destino, tras el sitio de Kangayowa, se ignora.

52-Shakowa: herrero del contingente de Uyasewa, que lleva un año en Kangayowa cuando el sitio. Luego se le unen otros tres colegas, que venían con las tropas del gorakan Yarawo. Se queda en Khork, como súbdito de la duquesa Ygrelth.

53-Shonto: el dios Cielo, para los yowas.

54-Soltorobol: brujo gadeo, que trabajó desviando la atención de los shamanes geomantes yowas de la mina bajo la barbacana desde que los leprosos de Ilkandra comenzaron a excavarla, y luego disimulando la apertura de la cámara de fuego. Su destino, tras el sitio de Kangayowa, es desconocido.

55-Sorikalai: patriarca gadeo, de edad indeterminada en el momento de los hechos. Como todos sus predecesores, reside en el gran templo de Subural, en Arbastalaba.

56-Subural: dios marino de los gadeos. Un humanoide gigante, con aletas y piel cubierta de escamas. Los gadeos creen que los leviatanes son sus hijos. Su templo en Arbastalaba, capital gadea, es el segundo mayor de Ardabla, tras el yowa de Shontoyuén. Sobre él flota siempre una nube azul, ilusoria, que mantienen los brujos gadeos.

57-Talberth: barón de Termokh, jefe de la guardia real montada khork. Hermano de la bella Yaralth, amante del rey Korgalth II. Alto, fortísimo, de rostro lleno de cicatrices, con un ojo azul y otro verde, como su hermana. Tiene una espada enorme, ancha y tosca, que sus enemigos llaman La Barra… cuando él no puede oírlos. Usa una armadura negra, sin adornos. Muere a manos del gigante yowa, Oyoga, en desafío uno a uno, inmediatamente después de Gumgarth Partecráneos: el Martillo de Shonto lo parte en dos, como a su espada, cuyos restos recoge de Kalagraz.

58-Tatao: joven pastor yowa que, junto a su amigo Doniwa, descubre el desembarco del gran ejército mercenario que envía Korgalth II para atacar Kangayowa por la retaguardia, bajo el mando del príncipe Bulith de Harmalk y el marqués Horth de Julgraz. Enviado a Kangayowa, junto con su amigo Doniwa, como emisario del Tarawa para el gorakan Yarawo, con el mensaje de que abandone la fortaleza y ciegue el túnel, da media vuelta al descubrir que ya está hecho.

59-Turagán: princesa tumbriana, hija del rey Walo y sobrina del rey Wodo, que se casa con Korgalth II, en 4323, año del sapo y el hueso. Adicta a las mangas largas y los cuellos altos, enemiga de los escotes y las faldas cortas, terminó para siempre con la inmoral influencia de la baronesa Yaralth en la corte de Khork. Para inmenso placer de Nugorth, el elegante, pero serio arcipreste de Wylan en palacio… y del resto de sus colegas.

60-Urwako: mestizo de khork y yowa, calderero ambulante, que informa a los yowas… y es muerto por ellos, tras ser premiado por su traición con dos noches entre las prisioneras khorks, para que no haga lo mismo con sus enemigos. Su hermano es Gargluth.

61-Uyasewa: veterano guardián de los muros de Kangayowa. Lleva un año en tal responsabilidad, al comenzar la historia, y le quedan otros dos. Dirige la defensa de la fortaleza contra los khorks, junto con el caudillo Yarawo. Experto guerrero, su barba está dividida en muchas trenzas semicanosas. Muere por el disparo del rifle de un francotirador tumbriano, Gorfán, que rebota contra el peto de Yarawo, contra quien estaba en realidad dirigido, el balazo.

62-Walith: caballero de Urzoth, capitán y segundo al mando del comandante Tarbelth en la guardia real de Khork. Muerto en la entrada del puente por el gigante Oyoga, cuando intentaba infiltrarse en la fortaleza, a la cabeza de otros guardias reales, todos disfrazados como jinetes yowas.

63 y 64-Walo y Wodo: jóvenes reyes gemelos de Tumbria, en el momento del asedio. Padre y tío de la princesa Turagán, respectivamente.

65-Wylan: héroe cultural, creador del almanaque y la agricultura, también fundador de la mítica ciudad que llevó su nombre, primera civilización de Ardabla. El tiempo se cuenta desde tal hecho. Luchó contra monstruos y gigantes. Usaba un casco parecido a las barbutas gadeas, pero con cimera y penacho. Los tumbrianos se consideran sus herederos. Los khorks lo divinizaron y le rinden culto, en una religión mediada por sus arciprestes.

66-Yagulth: vizconde de Kalagraz, segundo hijo de Yaralth y Arboth, padre del narrador. Interesado en la caza y la pesca, no en la historia ni la vida militar; principal criador de gallos espejo, en todo Khork.

67-Yaralth: baronesa de Termokh, amante del Korgalth II, Arboth de Kalagraz… y muchos otros; célebre por su belleza y llamada la diosa de los ojos de gemas, por tener una pupila azul y otra verde, condición que comparte con su hermano Talberth, jefe de la guardia real de Khork. Es tan menuda y delicada como su hermano es tosco y enorme. Veleidosa y calculadora. Inició, entre las nobles cortesanas de la capital, la seductora moda de dejarse suelto el cabello, teñírselo de colores inverosímiles y rizárselo, así como de usar escotes pronunciados y faldas tan breves que muestran los muslos hasta muy alto, por encima del final de las medias de seda. Repudiada luego por el rey, por motivos no muy claros, se casó con el conde Arboth de Kalagraz y tuvieron cuatro hijos, aunque él nunca abandonó a su amante Lyrdia.

68-Yarawo: joven y feroz kan yowa, que, alzando su sable, propuso invadir y saquear Khork para conseguir alimento, y fue por tanto nombrado gorakan, líder supremo de dicha expedición armada, una vez que su plan fue aceptado por el resto de los jefes tribales. Su cabello le llega a la cintura, pero aún es imberbe, al comenzar la novela. Se queda en Kangayowa para ayudar al kaikodo a defender la vital fortaleza contra los khorks que quieren tomarla. Al morir Uyasewa, pierde su magnífico catalejo tumbriano, y decide defender Kangayowa hasta el último hombre. Se arroja sobre su sable, tras ser derrotado en lucha cuerpo a cuerpo por la duquesa Ygrelth de Kangayowa, que le parte una pierna en el singular combate, pese a ser una anciana manca. Muere con una rala barbita en el mentón.

69-Yekoshe: guerrero yowa, apodado Media Flecha por una bravata… o por la escasa longitud de su miembro viril.  Lo mata una cautiva khork, estrangulándolo con la cadena de sus grilletes. Amigo de Kowiya, le trajo la noticia del nacimiento de su primer hijo, Jingoshu, en el Cielo de Hierba.

70-Yerdirath: nacida Palbarapasa, en Gadea. Jefa o matrona de las peluqueras, manicuras y costureras (eufemismos elegantes para rameras caras) en Grakhork y el sitio de Kangayowa. Usa una alta peluca rosada y muchos anillos de fantasía en las manos. Ayuda a camuflar al barón Tarbelth y sus hombres de bárbaros yowas, en la escalada. Envía a sus chicas a ayudar al doctor Motkath, como enfermeras, en el hospital de sangre, cuando la escalada lo llena de heridos. Muere, gordísima y respetada, a los 78 años, y la sepultan con todos sus anillos… pero deja una cuantiosa fortuna para ser repartida entre sus empleadas, que en su honor fundan un nuevo burdel, “La gadea rosa”, muy de moda en Grakhork desde su misma inauguración, que luego se convertirá en “La Rosa de Gadea”… y cuyas chicas tienen fama de hacer DE TODO.

71-Ygrelth: veterana coronela khork, apresuradamente nombrada generala, para dirigir la conquista del castillo de Kangayowa. Nacida con el nombre de Li Gun Jo, su familia de Hi-Fhon emigró a Khork. Tiene unos 60 años en el momento del sitio. Experta combatiente, ha servido como mercenaria en numerosos ejércitos extranjeros: perdió la mano izquierda en 4293, en Xasta, por una picada de chinche que se infectó: usa un casquillo de cuero para cubrirse el muñón. Gran luchadora sin armas; aprendió en Obolobo. Es la mejor estratega del país. Corpulenta, con el canoso cabello cortado al rape, lleva un viejo tardir, sable corvo de caballería xastana, en la cadera izquierda. Lo rompe, el día de la ejecución. Nombrada duquesa de Kangayowa, por su éxito, por el rey Korgalth II el Salvador, muere a los 91 años, sin hijos, pero madrina de los dos de Ilkandra y Jorklith; al mayor, Nergath, le lega los restos de su tardir roto, y luego lo nombra su heredero al frente del ducado. Es el abuelo del narrador.

72-Yoganda: kan yowa, primero en ser vencido y muerto por los catafractos del coronel N’bule, en su ataque inicial contra los nómadas invasores.

73-Yolthrig: bello corcel de batalla, castrado blanco que el coronel catafracto abulano N´bule regaló al rey Korgalth II, y que dicho soberano llevó a la guerra con los yowas. Tras haberlo hecho caer a un barranco, fracturándole ambas piernas y un brazo, el enfurecido monarca ordenó que el semental fuera sacrificado. Pero, sin que el rey lo supiera, Ygrelth se adueñó del animal para su propio uso, disfrazándolo apenas con unas manchas negras de betún. El coronel N´bule lo usa para luchar contra Oyoga… que lo perdona, pero mata al caballo.

74-Yuwesa: guerrero yowa al que los ryukeshas capturan, desuellan y vuelven a coserle la piel encima… al revés. Tarda tres días en morir.

Toponimia

Abula: nación de Bureka, el continente sur de Ardabla. Capital: D´Yabel, ciudad interior, sin puerto. Es una estrecha franja costera: el interior del territorio es un desierto rojizo e intransitable, cuyos límites con Haz-Meleth son imprecisos, y el borde el mar es una larguísima playa de arena baja, sin puertos dignos de mención: los abulanos no son buenos marinos, cuando más construyen balsas y piraguas que no se alejan mucho de la orilla. Rinden culto a multitud de dioses extraños y de aspecto monstruoso, con partes de animal, como Gamelón y M´jumba. Son hombres negros y muy altos, excelentes jinetes que crían corceles de guerra grandes y pesados en sus arenosos pastos. La bandera nacional es un corcel negro rampante, sobre fondo rojo. Sus catafractos mercenarios, la mejor caballería pesada que se conoce, luchan en toda Ardabla, pero tienen reputación de amantes de hombres. Los rige un presidente, periódicamente electo entre sus más destacados jefes: república militar. Usan una cronología diferente a la del resto de Ardabla, que tiene por año 1 aquel cuando su primer contingente mercenario luchó por dinero.

Agadea: gran océano central de Ardabla, al que deben su nombre las islas Gadeas. Al oeste está el continente de Ñénza; al noreste, Vhumbor; al sureste, Bureka, separados por el estrecho de Falgabe.

Arbastalaba: isla capital de Gadea. Aloja el gran templo de Subural, residencia del patriarca y sobre el que dicen que flota siempre una ilusoria nube azul.

Ardabla: el mundo conocido.

Bureka: continente sur de Ardabla, donde se ubican Abula y Haz-Meleth.

D´Yabel: capital abulana. Ciudad interna, sin salida al mar.

Ekirgán: capital tumbriana, gran ciudad fabril y puerto, aunque sus aguas permanecen heladas tres cuartas partes del año.

Falgabe: Mar o estrecho que separa los continentes de Vhumbor, al norte, y Bureka, al sur.

Gadea: nación del ecuador de Ardabla, formada por muchas islas montañosas, la mayoría con volcanes activos, cuya gente de piel rojiza se afeita el cráneo en honor a su dios marino Subural. Capital: Arbastalaba, gran puerto, donde está el segundo mayor templo de Ardabla, dedicado a Subural. Bandera: la gran cabeza gris del dios, con sus aletas y agallas, emergiendo del agua verde, bajo un cielo nocturno azul oscuro, salpicado por estrellas de seis puntas, una por cada isla del archipiélago.

Les gusta vestir de blanco, con flotantes vestiduras. A veces momifican a sus muertos. Grandes comerciantes y navegantes, famosos piratas, nunca se acercan a los leviatanes, que consideran hijos de su deidad. Teocracia; los rige un patriarca cuya edad nadie conoce, elegido entre los altos sacerdotes, y que reside en el templo de Subural en Arbastalaba. De este archipiélago salen los mejores magos ilusorios de Ardabla. También forman buenas tropas de piqueros.

Grakhork: capital de Khork, importante puerto marítimo y sede de la corte real y de la flota y armada del país. Plaza comunicada con el interior por anchos caminos, y protegida de ataques terrestres por la guardia real montada y por una alta muralla de bloques de coral, desde la que se asoman una decena de bombardas tumbrianas de gran calibre y muchas culebrinas y falconetes, que también pueden girarse para que apunten al mar.

Haz-Meleth: nación desértica de Bureka, el continente sur de Ardabla. Fuertemente aislacionista, sus habitantes crían camellos y evitan todo contacto con extraños, inclusive sus vecinos abulanos. Se cubren el rostro con velos que jamás se quitan; nadie conoce su aspecto.

Hi-Fhon: nación de Ñénza, el continente occidental de Ardabla, de la que es oriunda la familia de Ygrelth.

Husga: capital de Xasta, nación más sureña del continente occidental de Ñénza,

Jawar: cordillera que corre de norte a sur; se considera una rama de las Kolmadar, que van de este a oeste. Sus cimas siempre nevadas separan eficazmente Khork de Yowa. El único paso practicable a través de esta muralla natural es el túnel de Kangayowa, horadado en la roca viva, y guardado por la fortaleza del mismo nombre.

Kangayowa: significa “puerta de Yowa” en dicha lengua. Único paso entre Khork y Yowa, entre este y oeste de la cordillera Jawar. Un túnel de quinientos pies de largo, excavado en la roca viva, de acceso protegido por la fortaleza homónima. La avalancha que pone fin al asedio de 43 días lo ciega.

Kangayowa: fortaleza yowa construida hace siglos, tal vez milenios. “Puerta de Yowa” en su lengua. Situada en una meseta, arrinconada entre la ladera vertical de la montaña, en la que se abre el túnel que custodia, y un grupo de lagos artificiales rodeándola, para impedir la fácil aproximación de artillería e ingenios de sitio. Con muros gruesos e inclinados de piedra rojiza de origen desconocido, y un ancho foso lleno de agua. Su torre de homenaje cilíndrica o donjon es tan grande que resulta casi un castillo por derecho propio. Armada con trabuquetes, catapultas, balistas, y diez piezas de artillería, con almenas y torres con matacanes y aspilleras para arqueros y otros defensores, sostiene una pequeña guarnición permanente de doscientos guerreros bajo el mando de un kaikodo. El gorakan Yarawo suma cinco mil de sus propios hombres a tal defensa, durante el asedio que sufre por parte de los khorks.

Khork: nación al este de los montes Jawar. Sus habitantes son de ojos rasgados y lacio pelo negro, que ambos sexos dejan crecer y luego trenzan en apretadas coletas. Cortársela a ras del cráneo es señal de luto, sobre todo entre los de tierra adentro, cerca de las Jawar. Los de la costa son buenos marinos, tienen una flota mercante y de guerra poderosa, y acostumbran a andar descalzos y semidesnudos. Los del interior, agricultores que labran la tierra con arados tirados un único y enorme buey, pescadores en botes de cuero y cazadores de osos, lobos, ciervos, martas y otros animales, por su carne y piel; hábiles con arco y flecha, arpones, redes y cuchillos, visten de verde con manchones negros, para confundirse con la vegetación de su entorno, y usan flexibles mocasines de piel de ciervo. Son gente de pocas palabras. Algunos cazadores y pescadores se afilan los dientes. Pueden ocultarse con gran habilidad entre la espesura, lo que les ha granjeado una dudosa reputación de brujos y cambiapieles, capaces de adoptar la apariencia y poderes de animales y plantas a voluntad. Algunos lo son, sin dudas. Las mujeres y los hombres comparten todas las tareas. Los yowas los llaman, despectivamente, cavatierras, nadadores y comepeces. Rinden culto a Wylan y los rige un monarca hereditario, desde Grakhork, su costeña capital y puerto más importante del país. Su bandera es rojiazul, con ambos campos horizontales integrándose uno al otro en el centro en zigzag, como en la mordida de un escualo. Hay anchas carreteras asfaltadas, tendidas por Kurgaleth IV, el abuelo de Korgalth II, que comunican el boscoso y húmedo interior con la costa, sobre todo con la amurallada capital.

Kolmadar: altísimas montañas de Tumbria, nevadas todo el tiempo, que discurren de Este a Oeste. Se considera que las Jawar son una cordillera subsidiaria de esta, cuyas cimas se alzan a más treinta mil pies y nunca han sido coronadas.

Martaganga: atalaya de Obolobo, en cuya toma N´bule perdió su ojo derecho, por un canasto de cal viva que le arrojaron las mujeres desde la muralla que trataba de conquistar. La batalla tuvo lugar en 4311 dfw, año del garagul y el humo, o en el 1433, según la particular cronología abulana.

Mayabún: océano oriental, al este de Vhumbor, de Falgabe y de Bureka. Nadie ha navegado hasta su extremo este, si es que tiene fin. Sólo los piratas zumtaros se aventuran ocasionalmente en sus aguas. Se supone que allí pululan los leviatanes, y son agresivos como en ninguna otra parte.

Ñénza: continente occidental de Ardabla. Incluye Hi-Fhon, Obolobo, Pondiria, Xasta y Zumtar. Lo recorre la cordillera Ogabas, de norte a sur. Sus naciones suelen estar en guerra unas con otras, siempre contratando tropas mercenarias.

Obolobo: nación de Ñénza, continente occidental de Ardabla, de la que es oriundo Juborth. Muy buenos luchadores a mano limpia provienen de allí, también.

Ogabas: cordillera que atraviesa de norte a sur el continente de Ñénza. Es la más extensa de Ardabla, pues cruza las cinco naciones más occidentales de Ardabla, aunque no tenga cimas tan altas como las Kolmadar tumbrianas, ni siquiera como las Jawar que se alzan entre Khork y Yowa.

Pondiria: nación del occidental continente de Ñénza. El coronel N´bule y sus catafractos combatieron allí durante años, antes de ser contratados por el rey Korgalth II para enfrentar a los yowas: estaba en guerra con Hi-Fhon, entonces.

Shonto-hangada: “el vómito de Shonto” despectivo nombre que dan los yowas, que jamás navegan, ni tampoco saben nadar o aprecian el pescado, a cualquier mar o extensión de agua de considerables dimensiones.

Shonto-gawaz: Cielo de Hierba, nombre familiar de la estepa yowa.

Shontoyuén: Templo del Cielo, vetusta construcción ritual yowa, con enorme cúpula. Todo nómada debe pasar su umbral arrodillado y sin armas una vez en la vida, al menos. Es el mayor edificio religioso de toda Ardabla. Su exacta antigüedad se ignora.

Tumbria: nación norteña, que se considera heredera directa de la tradición de Wylan, pero rinde culto al dios de dos caras, Fujozz. Capital: Ekirgán, puerto cuyas aguas están cubiertas de hielo las tres cuartas partes del año.  Bandera: cabeza roja de dos caras de Fujozz en blanco al centro, en campo dividido de dos listas horizontales: la azul clara, abajo, por el mar; la blanca, encima, por el hielo. Sus habitantes son casi todos pelirrojos y de ojos verdes, bajos y corpulentos. Tiene altísimas montañas, las Kolmadar, que van de este a oeste. Los tumbrianos fabricaron las primeras armas de fuego, y aún producen las mejores y más modernas. También son hábiles en la óptica y otras manufacturas varias: sus sombreros de hierro, ingenieros militares, son célebres. Los rigen dos reyes, siempre gemelos; monarquía electiva por mediación de la voluntad divina de Fujozz.

Vhumbor: Continente norte y más frío de Ardabla, que incluye Tumbria, Yowa y Khork. Lo recorren, casi en la costa oriental, de norte a sur, la cordillera Jawar; y en el helado norte, de este a oeste, la Kolmadar, incluso más alta.

Xasta: nación del occidental continente de Ñénza. Su capital es Husga. El orfebre real de Khork, Bhuir-Xhoran, es oriundo de dicho país. La generala Ygrelth usa un tardir, sable de caballería xastano.

Yowa: nación al oeste de las montañas Jawar. Sin capital ni otras ciudades fijas, dada la condición nómada de sus habitantes. Su estepa, también llamada Shonto-gawaz o el Mar de Hierba, colinda al norte con Tumbria, al sur y oeste con el estrecho Falgabe y el océano Agadea, y al este con Khork. Sus habitantes, rubios de ojos azules, jamás se cortan el pelo ni se lo recogen, pero se afeitan el labio superior y se hacen una trenza en la barba por cada enemigo vencido. Adoran a Shonto, el Cielo, y a la guerra. Tienen shamanes, algunos de los que manejan cierta magia. Son nómadas criadores de ganado ovino, bovino y caballar; visten de lana y cuero. Grandes jinetes, cuyos caballos pequeños, hirsutos y resistentes jamás relinchan, y guerreros temibles con el arco compuesto y el sable curvo. No usan escudos; sus únicas protecciones corporales son petos y casquetes de cuero hervido, guarnecidos de pieles. Visten largas túnicas, pantalones holgados y botas altas. Divididos en clanes en constante pugna, los dirigen kanes y viven en yurtas de fieltro. Sus dos únicas construcciones permanentes son antiquísimas: la fortaleza de Kangayowa, y el Shontoyuén o templo del Cielo, el mayor de toda Ardabla. Consumen sobre todo carne y queso, como dieta. No aran la tierra, comen pescado ni saben nadar; cavatierras, comepeces y nadadores son insultos entre ellos. Sus estandartes son cráneos de toro de grandes cuernos, de los que cuelgan varias colas de caballo teñidas de diferentes colores, según el clan. No entierran a sus muertos, sino que los empalan en largas varas que clavan verticales, para que los buitres, mensajeros de Shonto, devoren su carne. Cuando van a la guerra, los clanes eligen un gorakan o kan de kanes para que los comande a todos. No les gusta rendirse mientras puedan montar o sostener armas, aunque no dudan en retirarse ante fuerzas superiores.

Yukla: ciudad costera de Xasta en la que, en 4293, año del leviatán y el tigre, hubo una batalla en la que participó Ygrelth. Allí compró el tardir que usa y perdió la mano izquierda.

Zumtar: nación de Ñénza, continente occidental de Ardabla. Sus gentes son grandes navegantes y temidos piratas, que se mueven por todos los océanos en sus grandes catamaranes, incluido el temible y oriental Mayabún.  A veces se atreven hasta a capturar leviatanes.

Otros elementos de interés

Adarve: pequeña terraza en lo alto de los muros de una fortaleza, por su lado interior y a unos tres pies por debajo de las almenas, para que sus defensores puedan caminar y sostenerse cómodamente.

Almanaque: las semanas tiene seis días, en Ardabla. El año, 12 meses de cinco semanas o 30 días, más un decimotercer mes de 5 o 6 días, según sea el año bisiesto o no. Los años, además de la cronología estricta, se identifican por la coincidencia de un animal (las Trece Bestias) y un material (también trece) respectivamente.

Animales

Materiales

1-Avispa

2-Guepardo

3-Leviatán

4-Cangrejo

5-Serpiente

6-Sapo

7-Tiburón

8-Oso pescador

9-Ciervo

10-Águila

11-Garagul

12-Pulpo

13-Hombre

1-Cuero

2-Gelatina

3-Metal

4-Madera

5-Piedra

6-Tierra

7-Hueso

8-Aire

9-Humo

10- Fuego

11- Agua

12-Aceite

13-Sangre

 Almena: muro de una fortaleza, generalmente de forma quebrada, en cuadrados o triángulos, para que sus defensores puedan protegerse mejor de los proyectiles de los sitiadores.

Arcabuz: arma de fuego portátil de ánima lisa y mecanismo de mecha, más ligera que el cañón de mano, pero más pesada y de menor alcance que el rifle, si bien más rápida de cargar. Suele apoyarse en una horquilla.

Arcabuceros: soldado de a pie armado con arcabuz. Son célebres los tumbrianos, que usan morriones, petos, y dirks al cinto, y visten de negro. Se afeitan las sienes y la nuca, dejándose el pelo sólo en lo alto del cráneo. Llevan en bandoleras, colgadas del pecho, trece frascos con otras tantas cargas para sus armas: las Trece Bestias. Sus oficiales usan rifles. Bandera: dos arcabuces cruzados sobre un dirk y bajo un morrión, en campo rojo.

Arcipreste: sacerdote khork del culto a Wylan, guardián de la moral. Tienen formación paramédica, y pueden actuar como enfermeros, además de ofrecer consuelo espiritual a los heridos.

Ariete: ingenio de sitio, gran viga para golpear puertas o muros de fortalezas enemigas. Puede ser libre, si es sostenido por los que lo manejan, taladro, si se desliza sobre troncos, o colgante, si se balancea pendiente de cadenas. A menudo se le recubre con un testudo o protección contra los proyectiles que le lanzan los sitiadores, que evita que los hombres que lo manejan resulten heridos.

Avoyun kangüé: temido grito de guerra de los catafractos: en abulano significa “no hacemos prisioneros”.

Bacinete: yelmo cerrado, generalmente compuesto por varias piezas articuladas, pesado y caluroso, pero que ofrece protección total para cabeza, rostro y cuello.

Baluarte: torre o sección adelantada de la muralla, que permite hace fuego lateralmente desde una posición adelantada contra cualquier atacante que intente superar los muros. La mayor parte de las veces son triangulares, pero también pueden ser de sección redonda, como los tres de Kangayowa.

Barbacana: fortificación secundaria, generalmente circular, que controla el acceso a la principal. Pueden ser simples empalizadas, o muros de cantería, incluso con fosos. La de Kangayowa es vencida por una mina, que hace colapsar sus muros, y luego los sombreros de hierro tumbrianos la demuelen, con arietes, cuando el Ejército Libertador asciende hasta la meseta de la fortaleza principal.

Barbuta: Yelmo unitario y de perfil cilindro cónico, que envuelve toda la cabeza, dejando libre ojos, nariz y boca, por una abertura en forma de horqueta con la doble rama hacia arriba, para ojos, nariz y boca. Inspirados en cascos de la antigua Ardabla, como el que Wylan usaba, pero sin cimera ni penacho de ningún tipo. Suelen llevarlos los piqueros gadeos. El comandante Sabarupal lleva la suya atornillada al cráneo, según se dice.

Baltnvhess: gran avalancha de nieve y roca en la montaña, en tumbriano. Una, provocada por la explosión de cincuenta barriles de pólvora, cae sobre Kangayowa, el día Gurzegh, al final del sitio, cubriendo con millones de libras de tierra los muros y casi todo el donjon… y cegando el paso a través de la montaña.

Barong: cuchillo gadeo, con característica forma lanceolada o de hoja, magnífico tanto para el combate cuerpo a cuerpo como para arrojarlo. Los piqueros gadeos suelen usar varios, en una bandolera atravesada sobre el pecho. El comandante Sabarupal mata con uno al asesino Gargluth, clavándoselo en la frente desde varios pasos de distancia.

Blanquinegro: se llama así a la tropa combinada de arcabuceros tumbrianos y piqueros gadeos, por sus libreas, respectivamente negras y blancas.

Bolaño: proyectil de piedra, más o menos esférico, que lanzan las bombardas, catapultas y trabuquetes. Al impactar suele fragmentarse en multitud de esquirlas, lo que lo hace aún más peligroso que las balas de metal.

Bombarda: cañón de gran calibre, con recámara separada del ánima. Tienen baja frecuencia de fuego, pero efectos devastadores.

Brigantina: chaleco o jubón de cuero reforzado con remaches o placas, forrado de tela por dentro. Armadura simple, ligera y flexible, pero no muy resistente. Ygrelth usa una de cuero de buey.

Cambiapieles: brujo humano cuya única habilidad es ser capaz de adoptar el aspecto y las habilidades de un animal o planta. Debe tener dimensiones similares: no es posible ganar ni deshacerse de masa corporal, en la transformación. Cada cambiapieles puede tomar la apariencia de un único ser vivo. La metamorfosis es muy dolorosa, aunque dura sólo unos pocos segundos. Al morir, el cambiapieles retorna a su forma humana original. Esta clase de hechiceros son raros en toda Ardabla, pero abundan un poco más entre los khorks de tierra adentro; muchos de los que poseen el don se afilan los dientes, sobre todo si se transforman en una bestia predadora. Pero no es una práctica obligatoria, y también hay cazadores khork que se afilan los dientes sin ser cambiapieles, lo que puede inducir a confusión.

Cañón de mano: primitiva arma de fuego portátil; un cañón de escaso calibre con una larga vara, a modo de culata. Tiene un gran retroceso y no es preciso, duradero ni fácil de cargar, pero sí barato de construir.

Capacete: casco hemisférico de hierro o acero, forrado por dentro de algún material acolchado. Puede tener añadidos otros elementos protectores como celada, visera, etc.

Catafractos: soldados de caballería pesada abulana, tradicionalmente los mercenarios mejor pagados de Ardabla por su gran efectividad en combate, aunque no son una tropa muy efectiva para la persecución sostenida, por sus pesadas corazas. Sus caballos de guerra son los de mayor alzada que se conocen; usan completa armadura: con testeras, capizana, petral con púa y flanqueras de cota de escamas. Los jinetes visten de rojo y se protegen con cotas de escamas, petos musculados, brazales, grebas y yelmos con facciones (bajo los que llevan sus trenzas, hechas un rodete) Usan largas lanzas y espadas rectas de doble filo, pero no escudos. También manejan ballestas ligeras y, más recientemente, las modernas pistolas, de las que cada combatiente suele llevar dos o incluso más, o también una de dos cañones. Son muy disciplinados y maniobran con extraordinaria precisión.

Catamarán: buque de dos cascos paralelos, muy estable y de poco calado. Los usan los zumtaros, sobre todo los piratas.

Cavatierra: Insulto yowa a los agricultores.

Celada: protección del yelmo para el rostro, que puede ser fija o removible.

Cervelliera: casco de metal hemisférico, para proteger el cráneo y el cerebro. Puede o no llevar celada.

Cigüeña: ingenio de asedio: un balancín que pivota sobre un poste, con un contrapeso en el extremo corto, y en el largo un barril donde van varios sitiadores, para elevarse a la altura de las defensas enemigas. Recurso muy desesperado.

Comepeces: insulto yowa a los que se alimentan de pescado.

Cronología: en Ardabla, la forma más difundida de medir el tiempo es contar los años a partir de la fundación de la mítica, ancestral ciudad de Wylan, por el héroe cultural homónimo. Después de la fundación de Wylan (dfw): 4287 dfw, año de la serpiente y la sangre; 4289 dfw, año del pulpo y la tierra; 4293 dfw, año del leviatán y el metal; 4294 dfw, año del sapo y el aceite; 4311 dfw, año del garagul y el humo; 4321 dfw, año del guepardo y la gelatina; 4322 dfw, año de la avispa y el cuero; 4323 dfw, año del hombre y el aire; 4326 dfw, año del oso pescador y el agua; 4358 dfw, año del ciervo y la piedra. Los abulanos usan otro sistema.

Culebrina: cañón largo y de bajo calibre, pero de mayor frecuencia de fuego y alcance que la bombarda. Pueden fundirse en hierro, más caro y resistente, o en bronce, más barato, pero cuya precisión y otras cualidades de tiro se deterioran notablemente, si se calienta mucho.

Dirk: arma blanca tumbriana típica. De hoja estrecha y de doble filo, puntiaguda, como daga larga o espada corta. Fergán atraviesa el corazón de Oyoga con uno, cuando lo tiene en la mano.

Donjon: también llamado torre de homenaje. Ciudadela de la fortaleza donde suele residir su comandante, último reducto central, a veces con puente levadizo propio, Generalmente es también el punto más alto del castillo. El de Kangayowa es el único sitio de la antigua fortaleza que queda por encima del nuevo nivel de la montaña, tras la avalancha que pone fin al asedio.

Ejército Libertador: nombre que impone Korgalth II a la fuerza combinada de Perros de Mar del comodoro Lomborth, guerrilleros ryukeshas de Gumgarth Partecráneos y catafractos abulanos del coronel N´bule, a los que luego se suman los arcabuceros tumbrianos del mayor Fergán, los piqueros gadeos del comandante Sabarupal, la guardia real del barón Talberth de Termokh y los sombreros de hierros tumbrianos. Llega a contar con unos siete mil efectivos, en el asedio a Kangayowa.

Estandarte: los de las naciones civilizadas suelen ser las banderas nacionales. Los cuerpos armados, como arcabuceros tumbrianos y piqueros gadeos, tienen las suyas propias. Los yowas usan un bucráneo en lo alto de una vara, del que penden colas de caballo teñidas de colores. El gorakan Yarawo crea uno especial para las tropas que defienden la fortaleza de Kangayowa: dos calaveras de toro, enlazadas dentro de un círculo de hierro con púas.

Falconete: cañón largo, de pequeño calibre. Sinónimo de culebrina, por lo general.

Falquión: sable típico de los Perros de Mar khorks. Hoja de un solo filo, de lomo recto, y curva por el filo, que se va ensanchando hacia el extremo y luego se aguza bruscamente. La guarda tiene nudillera en cazoleta para proteger una mano, y el pomo se prolonga en una púa terminada en cabeza de halcón, que le da su nombre al arma y ofrece agarre para la otra mano.

Foso: ancha y profunda zanja que rodea a una fortaleza, para dificultar el acceso a los muros a cualquier sitiador. Pueden ser secos, con estacas o inundados.

Fujozz schoblen bodesgräun: maldición tumbriana, algo así como “Fujozz rehúsa mostrarnos sus caras”.

Galera: buque de guerra típico de la armada khork. No lleva mástiles ni velas. De cincuenta, cien o doscientos remos. Largo, estrecho y veloz, pero de escasa capacidad de carga.

Gallo espejo: volátil doméstico, muy raro, cuyas plumas de la cola tienen un asombroso brillo metálico y tornasolado, y son muy apreciadas para la decoración. El padre del narrador, Yagulth, es su más reputado criador, en Khork.

Gambesón: grueso chaquetón acolchado. Se puede usar como armadura por sí mismo o para amortiguar el peso de una loriga metálica, que se lleva encima.

Garagul: semimítica criatura, como un gusano volador de muchos colorees y con hermosas aletas, que flota en la alta atmósfera de Ardabla. Tiene ojos compuestos facetados, púrpuras, y decenas de tentáculos que le salen de la boca, rojos, azules y amarillos. Miden decenas, tal vez cientos de pies de largo: mayores, incluso, que los leviatanes marinos. Pero nadie ha visto uno de cerca, y muy pocas personas, ni siquiera de lejos. Hay quien cree que son sólo ilusiones, como las que producen los brujos gadeos. Se supone que son de buen augurio, mensajeros de Wylan. El penúltimo día del asedio uno juega es divisado jugando entre las nubes, encima de Kangayowa. 86 años después, se dice que un grupo de tumbrianos, con los nuevos fusiles de repetición de Joyán, destruyen a uno; su carne ardió al ser atravesada por las balas. Algunos dicen que estaba llena de burbujas de gas inflamable, más ligero que el aire, secreto de su flotabilidad.

Glacis: parapeto de tierra inclinada que se alza antes de la muralla, para hacer rebotar los proyectiles enemigos. Generalmente, si hay foso, se coloca delante de este.

Gorakan: kan de kanes, jefe supremo de una guerra o expedición punitiva, entre los yowas. Yarawo.

Guisarme: arma típica de los Perros de Mar khorks. Un asta de seis pies con una cabeza de guerra de tres puntas, que incluye lanza, uncino o gancho cortante delantero y pico trasero, ambos perpendiculares al palo.

Gülstien: empinada, abrupta, en lengua tumbriana.

Gurzegh: día del final de otoño. Corresponde aproximadamente al equinoccio de dicha estación. El sitio de Kangayowa debe concluir esa jornada, por caprichosa orden de Korgalth II.

Helefor: Catamarán pirata del capitán Diaskolios, que conduce a Graghork al embajador yowa, kan Ikeda, y a sus cuarenta guerreros. Significa tiburón, en lengua zumtara.

Kaikodo: guardián de los muros, en lengua yowa. La responsabilidad se rota entre miembros de diferentes clanes. Cada uno la desempeña por tres años, durante los que debe permanecer en Kangayowa con una guarnición de doscientos hombres. Uyasewa y Kowiya lo son, sucesivamente. El segundo renuncia al honor para regresar a Yowa.

La Barra: espada del comandante de la guardia real de Khork, barón Tarbelth de Termokh. Un gran mandoble, llamado así despectivamente por algunos cortesanos, por sus dimensiones y tosca factura sin ningún adorno. Oyoga la parte en dos con su alabarda, al matar al barón. El vizconde Arboth de Kalagraz recoge el fragmento más largo, con la empuñadura, le saca punta y lo afila de nuevo. Fergán lo usa para rematar al Martillo de Shonto y luego el mismo de Kalagraz para hacer otro tanto con Gargluth, el doble agente y asesino yowa, cuando intentaba matar a la generala Ygrelth. El narrador+ la hereda.

Leviatán: inmenso pez marino de Ardabla. Tiene más de cien pies de largo, y un cuerpo cubierto de escamas durísimas, y devora todo lo que parece apetitoso, aunque sea un barco. Los zumtaros dicen que la capturan; pero es una dura faena. Los gadeos piensan que son hijos de su dios Subural y nunca se les acercan. Se dice que en el océano Mayabún atacan a los barcos.

Llave de rueda: mecanismo de disparo de armas de fuego. Una rueda metálica que hace girar un resorte hace saltar chispas al rozar contra un pedernal, lo que enciende la pólvora en la cazoleta y genera el disparo. Es más confiable que la llave de mecha, sobre todo en clima húmedo, pero hay que darle cuerda antes de cada disparo.

Llave de mecha: mecanismo de disparo de armas de fuego, el más primitivo. Una mecha de combustión lenta se mantiene ardiendo, y al apretar el gatillo, un resorte la acerca a la pólvora de la cazoleta, que entra en ignición, produciendo el disparo… si la pólvora está seca.

Matacán: pequeño agujero en el adarve, que se comunica con el exterior de la muralla, por el que los defensores pueden arrojar piedras, agua hirviendo, plomo derretido y otros proyectiles y/o sustancias, para dificultar el máximo posible cualquier escalada de los sitiadores. Sobre el rastrillo o puerta del puente levadizo suele haber uno más grande, en forma de galería cerrada con el suelo perforado.

Matamaridos: la espada del vizconde Kalagraz, así conocida por los duelos que ha sostenido usándola, contra los esposos de sus amantes. Sólo él la llama Matamiedos. Un estoque cortesano, largo y ligero, de un solo filo, pero que puede blandirse a dos manos. La guarda es en doble cruz: el pomo, de plata maciza y tachonado de esmeraldas. Oyoga la rompe. Los catafractos rescatan la empuñadura y montan en ella una de sus hojas, más larga, pesada y de doble filo, convirtiéndola en Matamonstruos, que usará como comandante de la guardia real, hasta su muerte.

Media sangre: mestizo. Generalmente despreciados por las naciones de las que son originarios su padre y su madre, a la vez, pero intermediarios naturales entre ambas culturas.

Mortero: cañón de asedio, pesado, de mucho calibre y ánima muy corta, que lanza granadas rellenas de pólvora y con gran elevación, para superar las murallas enemigas.

Morrión: casco con forma abarquillada, que cubre las orejas, pero deja el rostro desprotegido. Suele rematar en cresta, a veces afilada. Lo usan los arcabuceros tumbrianos, pues permite apuntar cómodamente.

Nadadores: insulto yowa a los que tratan de aventurarse en el Shonto-hangada, o cualquier mar o curso de agua de cierta profundidad.

Nambakún: ahora, en lengua abulana.

Neinke: no, en tumbriano.

Obul vemba: adelante, en lengua abulana.

Oso pescador: enorme plantígrado que sólo vive en Khork. Su piel es verdosa, por estar cubierta de algas vivas, de los lagos en los que le gusta nadar, atrapando peces, aunque come cualquier cosa. Tiene grandes garras y puede medir hasta siete pies de altura, erguido sobre las patas traseras. Pacífico y bonachón, se vuelve terrible cuando es molestado. La cambiapieles y líder ryukesha Gumgarth Partecráneos adopta la forma de una osa pescadora, para enfrentar a Oyoga, aunque no le sale muy bien. El tumbriano Fergán usa una pelliza de este animal como abrigo.

Paava: o capellina. Sombrero de hierro; yelmo típico de los ingenieros tumbrianos, con ala ancha circular, que protege el cráneo, pero deja al descubierto toda la cara.

Perros de Mar: nombre que reciben, popularmente, los infantes de marina khorks. Sus armas son guisarmes, falquiones, hachuelas de abordaje y ballestas. Unos pocos llevan viejos cañones de mano. Los oficiales y sargentos usan rodelas metálicas. En batalla se protegen con las cervellieras, capacetes de acero con celada, y gambesones guateados teñidos de azul, pero en el mar combaten descalzos. Sus órdenes se transmiten con una caracola. Durante la campaña del Kangayowa se vieron obligados a usar sandalias para marchar sobre el suelo duro. Su jefe fue el comodoro Lomborth.

Pica: lanza de infantería, pesada y larga (generalmente de unos doce pies) concebida especialmente para su uso contra cargas de caballería. A veces se transporta desarmada en dos secciones y se ensambla sólo en el lugar del combate.

Piquero: tropa de infantería que forma en cuadros compactos con largas picas, muy eficaz contra la caballería. Los gadeanos son famosos por tales unidades, que combaten protegidas por petos y con barbutas de acero, sin escudos ni otras armas que algunos cuchillos barongs, con ropas blancas.  En climas cálidos enrollan un trozo de tela a sus barbutas, como turbante. Sólo sus oficiales llevan largas espadas a dos manos, y no picas ni barongs. Bandera: dos medias picas cruzadas tras una barbuta.

Pistola: arma ligera, sobre todo de caballería, con llave de rueda, a la que hay que dar cuerda antes de que dispare. Algunas, como las que usan los catafractos abulanos, tienen dos cañones. Lo habitual es dispararla y luego arrojarla al enemigo. Cargarlas es engorroso.

Poterna: puerta en la muralla, generalmente pequeña, secreta y/o oculta, para permitir salidas subrepticias a los sitiados sin que los sitiadores puedan penetrar por ella. L< fortaleza de Kangayowa carece de ellas.

Puente levadizo: estructura abatible que sirve a la vez de puerta y de calzada móvil, permitiendo el paso sobre un foso, inundado o no. Generalmente son de una sola sección, aunque el de Kangayowa es tan largo que consta de dos tramos.

Rifle: o fusil. Moderna arma de fuego portátil, de ánima rayada, pero llave de mecha. De mayor alcance y precisión que el arcabuz, pero de recarga más lenta y fabricación mucho más cara y trabajosa. Los sargentos y oficiales de los regimientos de arcabuceros gadeos suelen llevarlos, para operar como francotiradores. Gorfán mata al kaikodo Uyasewa disparando uno. Joyán, hijo de Margulén Narayán, construye, en 4358, año del ciervo y la piedra, el primero de repetición.

Ryukeshas: Soplos Letales, en lengua yowa. Nombre que dan los invasores nómadas a la elusiva y cruel resistencia khork. Algunos de estos guerrilleros son brujos cambiapieles. Muchos tienen los dientes afilados. Su líder es Gumgarth Partecráneos.

Schüsse: bueno, magnífico, en tumbriano.

Shamanes: hombres santos yowas, sacerdotes de Shonto, cuya voluntad interpretan. Se tatúan el cuerpo y lo tienen cubierto de cicatrices, pues en sus rituales se cortan para invocar a la divinidad con su propia sangre. Usan túnicas con una sola manga, se afeitan rostro y cabeza, dejándose sólo un largo flequillo sobre la frente. Al ser ordenados, también pierden su individualidad y su nombre, y se dirigen unos a otros siempre como Shontolán o compañero de Shonto. Algunos detentan algo de magia y la pueden emplear en batalla, sobre todo trabajando conjuntamente. Dos geomantes intervienen en la defensa de la barbacana. Tres lectores de pensamientos frustran una rebelión-fuga de las cautivas khorks. Otro actúa como heraldo y traductor de Oyoga, durante su desafío a los sitiadores

Shontolán: compañero de Shonto, en yowa. Apelativo con el que los shamanes se dirigen unos a otros, ya que todos renuncian a su nombre e individualidad al servir al Cielo. Los yowas consideran sumamente irrespetuoso e inapropiado que cualquiera que no sea un shamán él mismo use ese tratamiento para dirigirse a un hombre santo.

Sombreros de hierro: sobrenombre de los ingenieros militares tumbrianos, por el yelmo con visera circular metálica que suelen usar, que en Tumbria llaman paava y en otras partes de Ardabla, capellina. También suelen llevar cota de malla. Rara vez, otra arma que no sea una daga.

Tardir: significa “alma” en xastano; sable típico de caballería de dicha nación: hoja de acero jaspeado curva y puntiaguda, afilada por el lado convexo y ligeramente más ancha y pesada en el extremo más distante de la empuñadura, que es curva, con guarda de barra con volutas opuestas y una cabeza humana en el pomo. A veces pueden tener una cadena, como nudillera suave, entre una de las volutas de la guarda y la boca de la cabeza del pomo. Ygrelth usa uno, muy viejo, y de cuya vaina se proyecta una especie de espina curva hacia afuera, que le permite sujetarlo con el muñón de la mano izquierda y desenvainarlo sólo con la derecha. Siendo ya duquesa de Kangayowa, lo regala a Nergath, el hijo mayor de Ilkandra y Jorklith.

Tarawa: Concejo Supremo, reunión de kanes y grandes guerreros yowas. Es convocado únicamente en épocas de grave crisis, cuando deben tomarse decisiones que afecten a toda la nación.

Testudo: techo móvil y blindado, de metal, madera, cuero o alguna combinación de estos materiales u otros, para proteger a los sitiadores de lo que les lancen los defensores desde arriba, cuando baten arietes contra los muros o portones de una fortaleza enemiga, o manejan otra clase de máquina de asedio vulnerable.

Wo: sí, en lengua tumbriana.

Ychort: juego de estrategia de Ardabla, que se juga con clavijas en un tablero de madera con agujeros. El rey Korgalth II se creía un talento de este pasatiempo. Su padre sí que lo era.

Yekule nan vetuhé: en lengua abulana ¡no tengas prisa para morir!

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7 comentarios sobre “Anexos de Los 43 días de Kangayowa, por Yoss

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  1. Hay gente aquí que no duerme ni festeja el 31 lol
    Por cierto…tiene buena pinta esto….
    ….
    PD: alguien me puede enseñar cómo me afeito el cráneo? 🤣🙃

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    1. Hazlo, aunque te recomiendo que te aprendas los nombres primero. Aunque debo señalar que son tres anexos en uno, pero Yoss solo ilustró el primero, así que para no tener a los demás sin fotos, los puse junto.

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  2. Ufff, demasiado complicado para aprenderselo de una.
    ¿La línea de aprendizaje de esta novela comienza en un estado vertical XD?
    Buen worldbuilding, confió en que Yoss haya dosificado bien todo y no me haga huir (por lo menos unos 30 minutos) para enfriar la cabeza, jaja.
    Expectativas altas ^o^

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    1. El anexo es un elemento de consulta, por si te pierdes en la novela y necesitas saber donde está quien o que es tal cosa. Puedes leer la novela sin consultarlo, yo lo hice así, pero mis recomendaciones es que te aprendas primero los nombres de los personajes, que son los que más confunden.
      Ya verás el viernes que viene, las cosas cambian y se hacen más ligeras.

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